La explosión este domingo en un piso del centro de la población ha obligado a desalojar no sólo el edificio afectado sino también a dos contiguos. Finalmente, sin embargo, algunos de los vecinos podrán volver a casa.

Los vecinos del edificio principal donde a primera hora de esta mañana se ha producido la deflagración, supuestamente de gas, no podrán pasar la noche en casa. Tampoco lo podrán hacer "parcialmente" los vecinos del edificio del lado, mientras que los vecinos de la calle Unión sí que lo podrán hacer, según han informado los Bomberos en un comunicado.

En declaraciones en Catalunya Radio, el alcalde de Premià de Mar (Maresme), Miquel Buch, ha explicado que uno de los edificios contiguos al de la explosión tiene un nivel de afectación menor pero que hay otro "que tiene una fachada que da al lado de la explosión y que está muy afectado".

En el Ayuntamiento se han registrado un total de 46 familias –aproximadamente un centenar de personas- afectadas por el siniestro, que ha obligado a desalojar tres edificios preventivamente.

Pabellón municipal para atender a los afectados

El Ayuntamiento ha habilitado el pabellón municipal -que tiene duchas, comida y camas- para atender a los afectados que no tengan donde ir y ha puesto en marcha, junto con el Servicio de Emergencias Médicas (SEM), un servicio de atención psicológica.

La explosión, ocurrida hacia las 08:15 horas en el segundo piso del número 194 de la Gran Vía de Lluís Companys de Premià de Mar ha provocado la muerte de una persona y ha herido a 17 mesas, tres de los heridos lo son de gravedad, uno de los cuales muy grave, seis leves y ocho han sido alta directa.