El director general de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento, Joan Delort ha declarado como investigado, este miércoles, ante la magistrada de Barcelona que investiga desde noviembre del 2021 si hay irregularidades en la contratación de las reparaciones en los vehículos del cuerpo de Bombers de la Generalitat, donde hay investigados un total de siete mandos de la direción general de Prevención y el gerente del grupo Iturri de Sevilla, que desde finales de los años 90 realizaba este mantenimiento. Delort ha explicado a la titular del juzgado de instrucción 14 de Barcelona que en mayo del 2021 escuchó una conversación de la entonces secretaria general de Interior, Elisabeth Abad, con otra persona que querían llevar la investigación reservada de estas supuestas irregularidades a la fiscalía, y que él les dijo que quizás era "precipitado". Y le respondieron que había cambio de conseller, de Miquel Sàmper (Junts) a Joan Ignasi Elena (ERC), y que no querían que los culparan de no haber hecho nada, según fuentes judiciales.

Joan Delort ocupaba el cargo de director de Emergencias 112 cuando el Departament de Interior derivó las sospechas a la fiscalía, que después las llevaría al juzgado. Y asumió el cargo de director general de Prevención y Extinción de Incendios, en junio de 2021, cuando la causa ya estaba siendo investigada hacía dos meses. Delort ocupó el lugar de Manel Pardo, uno de los investigados en el caso Bombers, y que alertó al área jurídica que faltaban recursos, anotando 2%, que una abogada de Interior  malinterpretó como una comisión inexistente, según las defensas, pero se refería al aumento del pago recogido en el contrato. En este sentido, Delort ha explicado que la contratación del 2019, que era la que estaba en vigor, tenía el mismo pliego de condiciones de hacía muchos años, y que hacía tiempo que se detectaba que era insuficiente y que la Generalitat tenía que ampliar el presupuesto de los Bombers.

Preguntado por el abogado de un sindicato de los Bombers, el director general de Prevención ha asegurado que ciertamente mantiene en el cargo a los investigados en este proceso; es decir, que no cuestiona su profesionalidad. En la investigación, falta para declarar una testigo y que los Mossos aporten los últimos informes que falta.

Investigados

Con respecto a la precipitación indicada por Delort, el abril pasado dos de los jefes investigados, Máximo del Valle, inspector y exresponsable técnico del contrato de los bomberos, y su superior, el sostsinspector Antoni Ramos, declararon a la magistrada que se sentían "enfadados" con los Mossos de Esquadra porque nadie les preguntó nada sobre este procedimiento de contratación y podían haber explicado muchos "errores" y malas interpretaciones que se recogen en los atestados. Del Valle fue quien envió un correo electrónico a sus superiores, a finales del 2021, alertando de que ya no quedaba presupuesto para reparar vehículos, y el departament, dirigido por el entonces conseller Miquel Sàmper (Junts), abrió información reservada, donde los dos investigados aportaron toda la documentación que tenían, pero no los citaron a declarar, como recoge la ley. Los mandos también atribuyeron al cambio de conseller a las prisas para derivar el caso a la fiscalía.

La investigación del caso Bombers  se abrió por los delitos de malversación de fondos, prevaricación, falsedad documental. La primera magistrada que instruyó el caso descartó de inicio el delito de soborno e incluyó como investigado Delort, aunque la información reservada se inició sin que él estuviera en el cargo actual. Los Mossos sostienen que se pagaba a Iturri por reparaciones falsas y dobles, hecho negado por el mismo responsable de la empresa, Eduardo José Díaz, que también está investigado. Los investigados admiten que se pagaban tarde las facturas de las reparaciones, cuando había presupuesto, pero que no eran duplicadas.

El conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, hizo paralizar la contratación con Iturri y encargó una auditoría para valorar si se habían malversado fondos. Por ahora, no se ha hecho difusión de ningún resultado.