El Síndic de Greuges ha iniciado una actuación de oficio para analizar la gestión de la crisis provocada por la propagación del coronavirus y su incidencia en las prisiones, donde ya se ha dado algún caso positivo, y centros de justicia juvenil dependientes de la Generalitat.

El defensor avisa de que la necesidad de suprimir las comunicaciones presenciales con el exterior y otras actividades formativas y de ocio "puede suponer un agravio adicional a la situación de privación de libertad y comportar un aumento de las tensiones" en los centros. En este sentido, destaca que la minimización de los riesgos tiene que ser el activo principal, pero las medidas "tienen que ser compatibles con el respeto a los derechos fundamentales".

Por este motivo, el Síndic de Greuges ha dirigido escritos de petición de información tanto a la secretaría de Medidas Penales, Reinserción y Atención a la Víctima, dependiente del Departament de Justícia, como al Institut Català de la Salut, Programa de Salut Penitenciària, del Departament de Salut.

El Síndic considera positivas algunas de las medidas adoptadas y puestas en funcionamiento por parte del Departament de Justicia, como el aumento del número de llamadas telefónicas semanales de las personas internas y el inicio del sistema de videollamadas, así como la progresión de personas internas en tercer grado y la flexibilización, con los debidos controles, de los terceros grados para que puedan quedarse en su domicilio.