"Ningún riesgo". Esto es lo que quiere garantizar la empresa Mémora, que ha restringido el acceso al público en sus tanatorios y a partir de ahora sólo permitirá el acceso a sus instalaciones a la familia más próxima del difunto. Es una nueva medida que se ha puesto en marcha por el intentar frenar la propagación del coronavirus. El grupo permite la presencia de un círculo reducido al muerto y sólo durante 30 minutos, según han explicado a través de un comunicado.
El objetivo es intentar reducir las aglomeraciones ante el estado de alarma decretado por el Covid-19. Por otra parte, también han expresado que no se harán ni ceremonias ni velatorios. De esta manera, la intención es evitar que coincidan despidos a la misma hora en un mismo tanatorio.
Hoy por hoy sin embargo, constatan que seguirán con normalidad los servicios de entierro e incineración de los difuntos. Según la empresa, no suponen "ningún riesgo", ni para los familiares ni para los trabajadores. Además, el grupo ha añadido que seguirá ofreciendo la posibilidad de organizar ceremonias de homenaje y de despido de los difuntos una vez haya acabado el estado de alarma.
Por otra parte, se ha puesto en marcha un servicio telefónico de apoyo emocional para profesionales de la salud y de servicios sociales. La voluntad es de ayudar en la "gestión del estrés y la carga emocional" que están experimentando los profesionales. Además, también se han reforzado las asistencias psicológicas y emocionales al luto.
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