Tercera semana que los niños y las niñas no van a la escuela y se quedan en casa como consecuencia del coronavirus. En algunos países se está pensando implementar que los niños y jóvenes puedan salir aunque algunos epidemiólogos lo desaconsejan. Pero, y ¿qué pasará al verano? ¿Y con las actividades programadas por Semana Santa? Las casas de colonias y albergues también hacen frente a la pandemia del Covid-19, con las medidas de cierre decretadas por las autoridades gubernamentales y con la responsabilidad con el fin de evitar su propagación. Pero con el estado de alarma y el coronavirus, desde el 14 de marzo, estos espacios educativos se han encontrado con un escenario incierto, justo cuando empieza el periodo de más actividad del año con las colonias escolares.

La ampliación del estado de alarma ahora también reunirá la suspensión de las estancias programadas durante la Semana Santa de las entidades de ocio del país. A estas alturas, todavía es una incógnita cuando se podrá volver a la "normalidad" y el gobierno no descarta hacerlo gradualmente. A pesar de todo, después de este periodo excepcional, por parte de todo el mundo habrá que recuperar la actividad habitual y, ahora más que nunca, tomará mucha importancia que niños y jóvenes puedan volver a disfrutar de espacios donde compartir y convivir, participar de actividades de ocio y de aprovechar oportunidades de aprendizaje con sus compañeros, al aire libre y en contacto con la naturaleza, según ha explicado la Asociación de Casas de Colonias y Albergues de Catalunya (ACCAC) a través de un comunicado.

Situación crítica justo antes del inicio de temporada

Esta pandemia ha coincidido con un momento clave donde ya hechas las inversiones en infraestructura y en recursos humanos, se disponían a empezar la temporada. Es por eso que muchas instalaciones se encuentran con una situación crítica que hace peligrar su continuidad, porque habrán perdido prácticamente en tres cuartas partes sus posibilidades de actividad habitual anual.

La entidad cree que las medidas actuales de la administración serán insuficientes debido a que un gran número de trabajadores de este sector son gestionados por pequeñas empresas y negocios familiares. Así, el ACCAC pide el apoyo de la administración con el fin de procurar mantener los compromisos contractuales de escuelas y entidades, aunque implique diferirlos a un tiempo donde puedan reanudar la normalidad perdida.