Ante la inminente salida de prisión del exjugador de fútbol Dani Alves, una cincuentena de trabajadores de prisiones se manifiestan delante de Can Brians 2, desde donde han denunciado que se han producido un centenar de agresiones a internos y funcionarios en los últimos 12 días, desde la muerte de una cocinera en el centro penitenciario de Mas d'Enric del Catllar. En concreto, han explicado nuevas agresiones este fin de semana en la prisión de Ponent y Lledoners. Los organizadores han convocado la protesta delante de este centro penitenciario para aprovechar la atención de los medios sobre el caso Alves y utilizarla como altavoz de sus protestas.

Las protestas de los funcionarios de prisiones se han trasladado este lunes en las puertas del centro penitenciario de Brians 2, donde se han desplegado pancartas donde se podía leer 'Núria ha muerto asesinada' o 'Aragonès cómplice'. También han cantado proclamas en contra de la consellera de Justicia, Gemma Ubasart, y del secretario de Medidas Penales, Amand Calderó. Siguen pidiendo la dimisión de los dos o la destitución por parte del presidente de la Generalitat.

Entre sus reclamaciones hay la de más seguridad en los centros penitenciarios, ya que aseguran que viven una "oleada" de agresiones, aunque puntualizan que no es nueva de ahora. En concreto, Francina, trabajadora en Mas d'Enric, ha explicado desde la protesta en Brians 2 que en los últimos 12 días una setentena de internos han sufrido alguna agresión y también una treintena de funcionarios, sean por agresiones directas o porque se han lesionado durante una intervención. "Cada día una decena de personas ha sufrido una agresión", ha manifestado, en declaraciones en la ACN.

Salida inminente de Dani Alves

Este lunes, Alves ha depositado la fianza de un millón de euros que le impuso la Audiencia de Barcelona el miércoles pasado para poder salir en libertad provisional a la espera de que sea firme la sentencia de 4 años y medio de prisión por agresión sexual. Decenas de medios de comunicación esperan desde el miércoles en las puertas del centro penitenciario Brians 2, en Sant Esteve Sesrovires, para captar la imagen de su salida. Alves ha podido ingresar esta fianza gracias al litigio que ganó contra la Agencia Tributaria. La Audiencia de Barcelona le ha impuesto una serie de medidas cautelares que acompañas la libertad condicional. Le retiró los pasaportes y tendrá que comparecer cada semana en el juzgado. Mientras esté en libertad tiene prohibido acercarse o contactar con la víctima.