Golpe judicial a Xabi Alonso. Un juzgado ha declarado "ilegal" la mansión que el exfutbolista se está construyendo en un paraje privilegiado de Txalin con vistas al mar en el monte Igeldo, en San Sebastián. La resolución del juzgado ordena la "paralización inmediata" de los trabajos y el derribo de la casa. La construcción de la casa no se ajusta a la licencia que otorgó el ayuntamiento, y, por lo tanto, contraviene la normativa urbanística de la zona y los permisos municipales, según revela la sentencia. Los denunciantes, entre ellos, el colectivo ecologista Haritzalde y la asociación vecinal de Igeldo, pidieron, hace 1 año y medio al ayuntamiento, la demolición de la propiedad. Junto con otras dos asociaciones pidieron la anulación de las licencias, y la restitución total de la zona, todo eso se materializó en la demanda que se ha resuelto justo ahora. Por su parte, el alcalde donostiarra, Eneko Goia (PNV), ha anunciado que el consistorio recurrirá la decisión.

chalet Xabi Alonso en Igeldo / Europa Press
El chalet de Xabi Alonso en Igeldo / Europa Press

Expropiación en Martunete

Según los denunciantes, la construcción de la casa de Xabi Alonso no se ajusta a la licencia que otorgó el ayuntamiento. El punto de partida del conflicto se sitúa el año 2015 cuando queda expropiado el caserío Goiatz-Berri, situado en el barrio de Martunete al quedar afectado por las obras de la línea de alta velocidad. Los propietarios solicitan la licencia al consistorio de San Sebastián para reconstruir la misma casa —una construcción típica del País Vasco con un tejado de dos vertientes y con una superficie de 406,8 metros cuadrados— pero a Igeldo, a unos 8 kilómetros de la casa original. A finales de 2016 reciben el permiso, pero con el compromiso de reconstruir el caserío respetando "la configuración original del edificio expropiado".

El chalet del actual entrenador del Bayer Leverkusen está prácticamente construir. Es una casa de lujo de más de 1.000 metros cuadrados con sótano y piscina, y se ha construido a una zona rural catalogada como "no urbanizable". En concreto, está situado en la parte alta de la ciudad, una de las zonas más lujosas de la capital donostiarra. Ahora, el juzgado ha anulado la licencia de que consiguió la sociedad Tavaro XXI SL, titular de la cual es Nagore Aranburu, mujer de Alonso. En mayo de 2018, el propietario del terreno y la licencia vende los derechos por 700.000 euros —100.000 por el terreno y 600.000 por la licencia— a la sociedad. En diciembre del mismo año se concede en la empresa una segunda licencia para edificar en la zona de Igeldo "una reconstrucción del caserío expropiado", según apunta la sentencia. El juez señala que el objetivo es reconstruir la casa, y la realidad es que no se ha hecho así. Según los denunciantes, "la familia del exfutbolista ha levantado "una residencia de diseño contemporáneo de alto standing". En este sentido, denuncian que la casa que ha levantado Xabi Alonso no tiene ninguna similitud con la edificación original. El magistrado apunta que el permiso exigía "si bien no una réplica exacta del caserío original, pero sí el respeto mayor posible construcción general del edificio expropiado". Sobre esta cuestión, el fallo judicial añade que si se comparan las dos construcciones "se aprecia de manera patente y notoria, sin necesidad de contar con conocimientos científicos o técnicos, la total divergencia", entre el chalet de Xabi Alonso y el original. Entre las diferencias más destacadas es el cambio de un techo de dos, tres aguas, se ha pasado a una lujosa casa "con un tejado totalmente plano".

La denuncia de los vecinos de Igeldo

La construcción del chalet de Xabi Alonso empezó el año 2020 y desde el inicio contó con la negativa de los vecinos, que consideran que no se puede permitir este tipo de construcción. Por esta razón presentaron una denuncia formal ante el Ayuntamiento de San Sebastián. Hace justo una semana, el Juzgado Contencioso - Administrativo número 3 de San Sebastián resolvió a favor de los demandantes.

Los vecinos sostienen que se ha permitido la construcción de una casa de 1.000 metros cuadrados en lugar de los 400 que tenía el caserío original y se ha autorizado una "piscina en suelo rural". "Los promotores han disfrutado de un cheque en blanco, se han saltado la ley y han tenido más ventajas que cualquier ciudadano. Es vergonzoso e intolerable", ha asegurado Karmele Garmendia, miembro del consejo de vecinos de Igeldo. Ante esta situación exigen su demolición. Los vecinos han asegurado, sin hacer referencia al exfutbolista, que decidieron denunciar los hechos "para evitar que se asiente un peligroso precedente y que cualquier expropiación pueda ser utilizada por especular y construir un edificio a la carta incumpliendo la ley de suelo". Con todo, la batalla judicial todavía no está perdida por el futbolista porque el consistorio ha anunciado que recurrirá la decisión.