Mañana empieza la campaña de incendios. Hasta el 15 de septiembre los cuerpos de emergencias están en alerta ante los fuegos forestales que "son inherentes al clima mediterráneo", en palabras de la consellera de Agricultura, Ramaderia, Pesca y Alimentación, Teresa Jordà, responsable del cuerpo de los Agentes Rurales.

Entre los cuerpos que trabajan en la campaña de incendios están los Agentes Rurales, que se han reforzado esta temporada con las nuevas tecnologías para trabajar en la prevención y en las causas de los fuegos forestales.

El año pasado se quemaron 1.983 hectáreas, y aunque en un 90% de los fuegos no se llegó a la hectárea quemada, en la campaña del 2017 hubo tres grandes incendios: el de Naut Aran, con 432 hectáreas; el de Artés, con 377 ha, y el de Tivenys, que quemó 123 ha, todas forestales.

La campaña de este año se espera "crítica", según Montserrat Barniol, directora general de Ecosistemas Forestales y Gestión del Medio, por la cantidad de sotobosque que hay y porque la vegetación está espesa, pero no se prevé tan complicada como la del año pasado. Con todo, el cuerpo de Agentes Rurales se refuerza.

Incorporan por primera vez drones con cámaras térmicas para trabajar tanto en la prevención como para establecer el perímetro del fuego.

Los drones permiten, además, detectar puntos calientes en el perímetro y evitar resurgimientos, uno de los grandes caballos de batalla, al mismo tiempo de controlar y extinguir los incendios.

Agents rurals - gemma liñán

Un 26% de los fuegos forestales son provocados intencionadamente, y por eso también se han buscado nuevas herramientas para detectar sustancias acelerantes del fuego, como carburantes o gasolina. Y para garantizar el establecimiento de causas, que también permiten trabajar para una mejor prevención, está Piris, el perro entrenado para encontrar sustancias acelerantes en la zona de inicio del fuego y que se ha presentado hoy en sociedad.