Tenemos bloques de hormigón para rato. Según ha adelantado La Vanguardia, el Ayuntamiento de Barcelona no los eliminará hasta el primer trimestre de 2022. Este elemento de el llamado "urbanístico táctico" se ha colocado durante la pandemia y ha sido objeto de controversia entre el vecindario, tanto por la seguridad como, por la estética. Se prevé sustituirlos por diferentes modelos de separadores de terrazas de forma progresiva.

De esta manera, se retrasa unos meses su retirada, que en principio tenía que tener lugar este año. En enero la comisión de Ecología, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad del consistorio votó a favor de retirarlos a propuesta de Ciudadanos. Los naranjas pedían su sustitución por elementos sustitutivos que "ayuden a mejorar la calidad arquitectónica del espacio público" y sean "más seguros" para "reducir el riesgo que representan" para los motociclistas. A pesar de ser una votación no vinculante, la concejala Janet Sanz se comprometió a hacerlos desaparecer durante el 2021.

Los bloques de hormigón amarillo se empezaron a instalar con el fin de ganar más espacio para los peatones en las calles de la ciudad. Con todo, su instalación causó mucha polémica entre algunos de los grupos municipales y consideró decenas de entidades, que suponían un peligro para la seguridad.

De hecho, el servicio de delitos contra la seguridad vial de la Fiscalía de Barcelona abrió diligencias de investigación para determinar si los bancos y las bolas gigantes de hormigón suponen un delito contra la seguridad del tráfico y prevaricación. En diciembre se archivó.

Muerte de un motorista

El centro de la polémica, sin embargo, lo causó la muerte de un motorista en Barcelona. Martí Estela, de 28 años, impactó contra uno de estos elementos en el cruce entre Balmes y Gran Vía. Un caso muy polémico porque había implicado otro vehículo y se tenía que determinar si el choque lo causó el turismo o el bloque| de hormigón.

A finales del mes de marzo, la magistrada del juzgado de instrucción número 13 de Barcelona pidió al ayuntamiento de la ciudad un informe sobre la seguridad de los bloques de hormigón a raíz de la muerte de Estela. A la causa están personadas cinco acusaciones particulares que representan miembros de la familia de la víctima así como la aseguradora.

 

Imagen principal, uno de los bloques de hormigón situados en Barcelona / ACN