La Audiencia de Barcelona juzgará a partir del miércoles una banda de contrabandistas de tabaco que era liderada por un guardia civil. Éste organizaba la introducción de la droga por el puerto de Barcelona. De aquí la trasladaban en camión hasta el puerto de Bilbao, desde donde se transportaba hacia otros países, como Irlanda.

El juicio tendrá lugar en la Sección Novena y se prolongará hasta el 18 de mayo, juzgando en total a 10 personas por asociación ilícita, contrabando de tabaco, soborno de funcionario, delito contra la propiedad industrial, blanqueo de secretos y revelación de secretos. El guardia civil que lideraba la red, Enrique D.A., podría afrontar una condena de 13 años de prisión.

Según el escrito de acusación de la fiscalía, la banda empezó a actuar en 2009 para introducir en España, por vía marítima, tabaco chino de contrabando. El guardia civil dirigía las operaciones desde Tenerife, pero viajaba a menudo a Barcelona para controlar el operativo. El jefe de la red consiguió que un cabo de su cuerpo e informara sobre las operaciones contra el contrabando, lo que le ayudó a prevenir intercepciones. Pero más tarde pidió ayuda a dos agentes más que se negaron a colaborar con él y denunciaron los hechos, cosa que permitió su detención.