La amenaza de un posible brote de gripe aviar sigue cerniendo por Catalunya, sobre todo en la zona de Soses (Segrià), donde el pasado 22 de diciembre ya se encontraron cinco pájaros salvajes muertos por este virus y donde ahora se han localizado 13 cadáveres más. Ya son un total de 18 los pájaros salvajes muertos en la zona. De estos solo 5 está claro que tenían la enfermedad y el resto se están analizando, pero en cualquier caso, si hay más casos positivos, no se consideraría que hay nuevos focos, ya que todas se han encontrado en un mismo perímetro.

Joaquim Porcar, jefe del servicio de coordinación territorial del Departamento de Acción Climática, ha comunicado que todos los pájaros muertos que se han localizado se encuentran dentro del mismo perímetro, así que aunque fueran por|para la gripe esta no habría creado focos nuevos. Desde el Departamento también se ha anunciado que se han hecho inspecciones a 26 explotaciones avícolas en un radio de 10 kilómetros para comprobar que todos los animales estuvieran bien y ha salido "todo correcto".

Por su parte, los Agentes Rurales, hacen acciones de vigilancia en espacios naturales y fluviales del perímetro del Segre y Utxesa, según informa la ACN. El Departamento de Acción Climática considera que el foco está controlado porque no afecta ni a las aves de corral, ni al de producción o consumo. Por eso, remarcan que Catalunya sigue siendo "libre de influencia aviar" porque el foco detectado está en animales salvajes.

Confinamiento aves y otras medidas

Ante esta situación se han puesto en marcha una serie de medidas, entre las cuales está la prohibición de la cría de aves de corral al aire libre. Si el confinamiento de los pájaros no es posible, el Departamento de Acción Climática podrá autorizar que se pueda seguir llevando a cabo esta práctica instalando telas pajareras o cualquier otro dispositivo que impida la entrada y contacto de pájaros salvajes con los de la explotación.

El confinamiento de las aves y el aumento de la vigilancia de los Agentes Rurales no son las únicas medidas que se han puesto en marcha en la zona. Los territorios considerados de riesgo también tienen prohibido la cría de patos y ocas con otras especies de aves de corral, así como utilizar pájaros del orden los Anseiformes i Charandriiformes como reclamo de caza.

Tampoco se puede suministrar agua a las aves de corral procedente de depósitos donde puedan acceder pájaros silvestres, excepto en el caso de agua tratada de manera que garantice la inactivación del virus de la gripe aviar. Está prohibida la presencia de aves de corral u otro tipo de pájaros cautivos como certámenes ganaderos, muestras, exhibiciones o celebraciones culturales, entre otros.