Nueve muertos más en un año. Esto es lo que hoy vuelve a denunciar el Reial Club Automòbil de Catalunya (RACC) en un anuncio a página entera en diferentes diarios y no sólo catalanes, sino también estatales. El texto pretende dejar claro que mientras "de un incidente imprevisto se llama accidente, de un incidente previsible [...] se llama pasividad".

El objetivo de este anuncio es hacer visible aquello que ya denunciaron ahora hace un año a través de una "contundente" campaña para que la opinión pública se hiciera eco de la "excesiva saturación de tráfico" en la N-340, así como denunciar también que "desde hace un año, hay una solución posible".

El gran volumen de tráfico acaba provocando accidentes mortales, muchos de ellos por el gran volumen de camiones que circulan –un 30%– y por los 25.000 vehículos que pasan cada día. Esto "pone en riesgo la vida de las personas que pasan", vuelve a poner de manifiesto el RACC, al mismo tiempo que destaca que ya hace más de un año que pidió una "solución inmediata" a este problema y Fomento les respondió el 23 de octubre del 2015 que la medida "se materializaría próximamente".

Su presidente, Josep Mateu, ha sido contundente recordando en diferentes radios que "un muerto es muchísimo" y se ha lamentado que ahora hace un año podía pensar que si desde el Ministerio de Fomento no se hacía nada era consecuencia del panorama político y tener un gobierno en funciones, pero ahora tiene claro que "no todo está en funciones" y que, por lo tanto, "hay una pasividad".

La carretera más peligrosa

Denunciando una y otra vez que "no hay ninguna carretera más peligrosa que la N-340", Mateu ha querido dejar claro que "no estamos en contra de los camiones", que, ha puntualizado, también son víctimas de estos accidentes, Mateu ha asegurado que no dejarán de insistir y, aunque ha puesto de manifiesto que, de momento, todavía nadie de Fomento se ha puesto en contacto con el RACC por el anuncio, tiene claro que ahora les toca insistir al ministro de Fomento en funciones, Rafael Catalá, "para que aceleren la medida porque en cualquier momento puede volver a pasar".

Bajo el título "nueve personas más han muerto en la N-340 en Catalunya mientras el Ministerio de Fomento estudia soluciones", el RACC ha puesto sobre la mesa en un comunicado que "la siniestralidad en la N-340 sigue acumulando accidentes" mientras Fomento "habla de soluciones sin concretar detalles" y recuerda que desde el 2010 han muerto 95 personas en este punto negro.

Fomento decidió poner unas rotondas, pero eso, según Mateu, "no creemos que sea una medida apropiada y así se lo dijimos" porque la mayoría de choques que tienen lugar en esta carretera son frontales por la cantidad de adelantamientos que se producen y, por lo tanto, no tienen que ver con las rotondas. La solución para el RACC para "no perder más tiempo" es desviar "urgentemente" los camiones al AP-7, mientras "se consensúan soluciones definitivas".

La solución

Bajo el hashtag #N340senseaccidents, el RACC quiere que todo el mundo se añada a la campaña y se haga eco también en las redes sociales para denunciar masivamente que la N-340 "no reúne actualmente las condiciones para garantizar la seguridad de los usuarios", así como reclamar "soluciones inmediatas a esta emergencia social".

La medida que propone el RACC es desviar los camiones de la N-340 en la AP-7 con una bonificación del 50% en los precios de los peajes, como ya se hizo en la N-II en Girona. Esta solución, no sólo reduciría los accidentes mortales, sino también "comportaría un ahorro de tiempo y combustible para los transportistas" y, además, aseguran que "no tendría ningún coste para la Administración" porque "la reducción del [precio] del peaje se ajustaría con el incremento del tráfico pesado en la AP-7".

La campaña del 2015

El RACC ya reclamó en septiembre del año pasado una "solución inmediata" a los problemas de siniestralidad a la N-340 a su paso por las Terres de l'Ebre, después de denunciar que sólo en el 2015 trece personas perdieron la vida.

Concretamente, pedía la "misma solución" que se aplicó en el 2013 en la N-II en Girona y que ha reducido en un 80% la mortalidad en la zona. Mateu recuerda que "sacar los camiones en Girona ha funcionado bien" y, precisamente por eso, ha vuelto a pedir que "se aplique aquí".