La Generalitat hace años que centra esfuerzos en dar más espacios a las mujeres en los cuerpos de seguridad de nuestro país. Se trata de un ámbito que históricamente ha sido muy masculinizado y, por lo tanto, donde cuesta más romper la brecha de la desigualdad. ¿Por qué es tan importante feminizar los Mossos, los Bombers o los Agents Rurals? La respuesta es, aparentemente, evidente, pero muchas veces genera dudas y reticencias entre la sociedad. Hoy, hablamos en ElNacional.cat con Alba Alfageme, jefa del Gabinete de Seguridad y Políticas Transversales del Departament d'Interior.
El primer paso: la paridad
Aunque la feminización va mucho más allá de igualar el número de hombres y de mujeres en los cuerpos, el primer paso de este proceso es, indispensablemente, favorecer que las mujeres se adentren a formar parte. Alfageme explica que no es una tarea fácil, ya que la desigualdad estructural que sufren hace que no tengan el mismo punto de partida que los hombres en este ámbito, ya que la masculinización histórica ha hecho sentir a las mujeres que no tenían cabida. Los roles y las dinámicas han estado siempre profundamente patriarcales y eso supone un obstáculo a la hora que las posibles candidatas den el paso.
Y es que los datos hablan por sí solos: en los Mossos solo un 22,9% son mujeres, a los Agents Rurals, un 13% y a los Bomberos tan solo son un irrisorio 2%. Por este motivo, este año, el Departament de Interior ha reservado un 40% de plazas de las nuevas convocatorias para mujeres. El recibimiento, según Alfageme, ha sido un éxito. Por ejemplo, en el caso de los policías, este año se ha conseguido que el 38% de los graduados fueran mujeres.
"Es evidente que a las mujeres les cuesta mucho más llegar al mismo punto que un hombre. Por lo tanto, tenemos que intentar ayudar. Lo que hemos hecho ha sido un reclamo. No es que las mujeres no aprobaran las convocatorias, sino que es que la mayor parte de mujeres no se lo plantean en su universo. Y no tiene sentido que a nuestros cuerpos de seguridad y emergencias haya estas desigualdades tan bestias. Por lo tanto, aplicamos medidas de acción positiva como es la reserva de plazas, pero en ningún caso quiere decir regalar plazas, sino que hay muchas más mujeres que se quieren presentar y, por lo tanto, también entran muchas más mujeres", explica la jefa del Gabinete de Seguridad y Políticas Transversales.
El Departamento calcula que si no se hubieran aplicado las medidas correctoras, la paridad habría tardado más de cien años en conseguirse al Cos de Bombers y más de cuarenta en los Mossos.
Por otra parte, Alfageme recuerda que no hay suficiente con conseguir la igualdad en los agentes. Hace falta ir más allá y hacer que las mujeres también ocupen posiciones de poder. "Feminizar también quiere decir transformar liderazgos. Los mandos de los cuerpos de seguridad y emergencias han sido muy marcados por esta sociedad patriarcal. La forma de relacionarse en muchas ocasiones ha sido desde la competitividad, con un punto, incluso, de relaciones desde la imposición. Y eso se puede mejorar con liderazgos transformacionales que apelan desde la feminización", relata Alfageme, que defiende también la reserva de plazas en estos estados.
Más allá de las cifras: feminizar para transformar
La feminización, sin embargo, va mucho más compleja que la paridad: significa un cambio de paradigma. Se trata de una transformación absolutamente transversal que tiene que romper todas las dinámicas establecidas hasta ahora. ¿Cómo se puede hacer eso dentro de los cuerpos? Según ha explicado la jefa de gabinete, el Departament está haciendo "un trabajo ingente" —por ejemplo, a través de formaciones— a fin de que absolutamente todo el mundo que forma parte de los cuerpos haga su trabajo con las gafas|ojeras de la perspectiva de género puestas.
La lucha contra las violencias machistas
"Feminización también significa poner en el centro, como un tema prioritario, la lucha contra las violencias machistas". Así de clara es Alfageme, que lamenta que "históricamente se haya considerado un tema menor e invisibilizado" cuando, en realidad, se trata del delito que más sufren las mujeres. Por eso, afirma que desde el Departament se le está dando prioridad máxima y se está transformando su abordaje.
Tal como anunciaban en la campaña La por canvia de bàndol, ahora, los Mossos trabajan para focalizarse en los agresores. Uno de los problemas que hemos tenido en el ámbito social es que siempre nos hemos focalizado en las víctimas. Está claro que se tienen que acompañar, pero en muchas ocasiones nos hemos olvidado del agresor. La presión social y policial tiene que recaer en él y tienen que tener la sensación que no viven en la impunidad", relata Alfageme.
El Departament calcula que "a mucho estirar" se denuncian tan solo entre un 7 y un 10% de las violencias sexuales, lo que significa que se trata de una gran lacra. Por este motivo, la jefa de gabinete ha querido recordar la importancia de romper el silencio en estos casos y los recursos de que disponen a las mujeres para hacerlo: "Puedes llamar al 900 900 120, que es el teléfono que depende de la Conselleria de Igualdad y Feminismos donde te podrán informar y asesorar sobre cuáles son los pasos a seguir. En cualquier comisaría de los Mossos puedes pedir información y asesoramiento para tener claro qué significa denunciar. Además, también hay un whatsapp de atención de Mossos d'Esquadra (601001122) y el 112, al cual puede llamar la persona afectada o cualquier persona del entorno directo o alguna persona que oiga alguna cosa".