La alcaldesa de Sabadell, Marta Farrés, ha denunciado haber recibido amenazas e insultos a través de las redes sociales después de condenar los disturbios en la ciudad entre ocupas y "radicales" que han acelerado la revuelta, casi a partes iguales. "Sabéis que no soy de hacer este tipo de publicaciones, pero hay líneas rojas que no se pueden traspasar y no puedo permitir que pasen sin consecuencias", ha comentado Farrés en una publicación en Instagram donde ha incluido en forma de captura los graves insultos y amenazas que le han dedicado varios usuarios; entre los cuales hay uno dice que "si fuera de allí [Sabadell] localizaría su vivienda y [le tiraría] ácido sulfúrico en la cara". "Estas son algunas de las amenazas y comentarios de odio hacia mí y hacia mi familia que he recibido en las últimas horas y que denunciaré y pondré en manos de los Mossos d'Esquadra para que sean investigados", ha avanzado la alcaldesa de la cocapital del Vallès.

"La discrepancia es legítima, pero no puede ser una excusa para el 'todo vale'. Hace falta una reflexión sobre el nivel de toxicidad que algunas personas están dispuestas a llegar, escondiéndose detrás del anonimato que ofrecen las redes sociales", ha señalado Farrés, que el viernes garantizó "contundencia" con los ocupas, pero también con los radicales que provocan disturbios. Después de varias noches consecutivas de tensión en la zona sur de la ciudad, la alcaldesa de Sabadell criticó que "grupúsculos radicales" aprovecharan la ocupación de dos locales por Sant Joan para provocar disturbios y "quemar contenedores, tirar cristales contra los locales y contra la policía". "Hay una serie de gente que manipula y que se lo coge por su lado. Nadie puede tomarse la ley por su cuenta", avisó Farrés.

 

¿Qué pasa en Sabadell?

Hace tiempo que los vecinos de Sabadell viven atemorizados por un grupo de jóvenes, la mayoría magrebíes, que han ocupado un local en la carretera de Barcelona. Después de varios episodios violentos a pie de calle, y de mucha insistencia de los ciudadanos que los sufren, las autoridades han pasado en la acción y ahora intentan echar a los ocupas. Esta acción ha desencadenado en una revuelta de los vecinos contra los ocupas que ha acabado con varios heridos por contusiones y graves incidentes, ataques contra la policía y contenedores y mobiliario destrozados. En torno a la medianoche del viernes, después de desplegar antidisturbios, los Mossos pudieron dispersar a los vecinos sublevados y también a los ocupas por las calles de la zona. Se prevé que los incidentes no cesen aquí, aunque las autoridades ya han anunciado un incremento de seguridad en la zona para evitar el descontrol.

¡Sigue ElNacional.cat en WhatsApp, encontrarás toda la actualidad, en un clic!