Casi 200 familiares y amigos de los dos jóvenes, una chica de 15 años de Amposta (Montsià) y un chico de 18 de Masdenverge (Montsià), que murieron en un accidente en la N-340 en diciembre de 2016, se han concentrado, este lunes a primera hora, en las puertas del juzgado de lo penal de Tortosa (Baix Ebre), donde ha empezado el juicio contra el hombre que los embistió con una furgoneta cuando ellos circulaban en moto en dirección a Sant Carles de la Ràpita (Montsià).

La fiscalía pide para el acusado, que conducía bajo los efectos de la cocaína, 4 años de prisión. Esta pena es insuficiente para los familiares de las dos víctimas que han reclaman "una pena ejemplar", de prisión permanente.

Los concentrados han recibido al acusado con gritos de asesino cuando ha sido trasladado en furgón policial a las dependencias judicial, ya que se encuentra en prisión preventiva por haberse saltado la prohibición de conducir que le había impuesto al juez.