Nuevo golpe internacional contra la gestión de la pandemia española. La revista científica The Lancet ha analizado las políticas de salud de nueve países diferentes que han empezado a abrir las restricciones contra la Covid-19. Nueve países representativos de las medidas y características que se han aplicado por todo el mundo y que las sitúa en dos regiones: Asia y Oceanía con Japón, Nueva Zelanda, Singapur, Corea del Sur y Hong Kong como región administrativa especial; y Europa con Alemania, Noruega, el Reino Unido y España.

Así pues, británicos y españoles se concluye que no han conseguido establecer un sistema efectivo de búsqueda, testeo, rastreo, aislamiento y apoyo antes de ir directamente y aliviar las restricciones. Y lo afirma a través de indicadores muy concretos: conocimiento del estado de la infección, compromiso de la comunidad, capacidad de salud pública adecuada y controles fronterizos. En líneas generales, los países de la región del Pacífico salen más beneficiados porque ya tenían sistemas previos, como la implementación de la mascarilla, mejor preparados para dar el abasto necesario.

Pero dentro de Europa, España queda a la cola: "Los países y las regiones han variado en su capacidad para implementar sistemas eficaces de búsqueda, testeo, rastreo, aislamiento y apoyo. Algunas ubicaciones en Asia, como Corea del Sur y Hong Kong, tenían sistemas que funcionaban bien al principio de la pandemia, y otros países, como Alemania, pudieron redistribuir recursos, mientras que algunos como el Reino Unido y España, han luchado".

Sistema de rastreo paupérrimo

Por otra parte, The Lancet remarca que eliminar las restricciones no consiste en volver a "la normalidad prepandémica sino en transitar gradualmente y con precaución a una nueva normalidad". España ha perdido en términos de velocidad, escala e intensidad donde no se han hecho pruebas rápidas, rastreo y aislamiento necesarios desde el inicio del brote, ni tampoco se ha reforzado con "una innovadora tecnología de vigilancia que ha retrasado considerablemente estos procesos". La revista científica también cita ejemplos bien ilustrativos como los sistemas de rastreo. En el caso de España podemos ver que es uno de los más deficitarios, tan sólo se ha limitado a un sistema de llamadas y una base de datos informática.

rastreo lancet

Herramientas de rastreo de contactos / Fuente: The Lancet

La diversidad de medidas, más allá de las regiones, también en una misma ciudad entre barrios, confunde al ciudadano. Además, también aseguran que uno de los grandes retos españoles es mejorar la capacidad del sistema sanitario, deficiente y agravado por "la falta de recursos y equipos para proteger a los sanitarios ante la primera ola". Como ejemplo, durante abril del 2020, un total de 15.000 sanitarios estaban enfermos o confinados, es decir, un 14% de los casos confirmados en todo el estado. Y los hospitales tan sólo contaban con diez camas de UCI por cada 100.000 habitantes.

En Alemania, para hacer una comparativa, había 34. Otra característica es que España ha sido el único país que no ha impuesto cuarentenas o restricciones a los viajeros extranjeros desde el 1 de julio. Los expertos que lo han analizado reclaman una evaluación externa a España para saber exactamente todo aquello que no se puede volver a repetir.