A veces es difícil distinguir entre los olvidos que se suelen experimentar a medida que pasan los años y la aparición de una patología. Gracias a una investigación desarrollada por expertos de la Universidad Estatal de Ohio, una nueva y simple prueba puede identificar los signos tempranos y sutiles de la demencia antes que otras pruebas cognitivas estándar. De momento está solo en inglés y se puede descargar aquí.

Esta detección temprana mediante el examen cognitivo se denomina prueba SAGE y los expertos creen que es fundamental para un tratamiento eficaz, especialmente a medida para la demencia y la enfermedad de Alzheimer. “Hay disponibles nuevas terapias que modifican la enfermedad y otras se están evaluando actualmente en ensayos clínicos, y sabemos que cuanto más temprano se detecta el deterioro cognitivo, más opciones de tratamiento tiene un paciente y mejor funcionan los tratamientos”, asegura el Dr. Douglas Scharre, director de la División de Neurología Cognitiva de la Universidad Estatal de Ohio y autor principal del estudio publicado en la revista Alzheimer's Research & Therapy.

Si bien la prueba no diagnostica definitivamente problemas como el Alzheimer, permite a los médicos obtener una línea de base del funcionamiento cognitivo de sus pacientes, y repetir las pruebas les permite seguir su memoria y sus habilidades de pensamiento a lo largo del tiempo. “A menudo, los médicos de atención primaria pueden no reconocer los déficits cognitivos sutiles durante las visitas al consultorio de rutina”, asegura Scharre.

La prueba se basa en un estudio que se llevó a cabo durante ocho años con 665 pacientes en el Centro de Trastornos Cognitivos y de la Memoria del Estado de Ohio. Los investigadores demostraron que la prueba SAGE identificó con precisión a los pacientes con deterioro cognitivo leve que finalmente progresaron a un diagnóstico de demencia al menos seis meses antes que otros métodos que se suelen utilizar.

Anciana

Entre los 164 pacientes con deterioro cognitivo leve inicial, 70 desarrollaron demencia. Esta es una tasa de conversión del 43% en tres o cuatro años, que es similar a las tasas de otros estudios académicos. La distribución de los diagnósticos de demencia incluyó un 70% por enfermedad de Alzheimer, un 7% de demencia con cuerpos de Lewy y un 9% de demencia vascular pura o mixta.

La prueba se puede realizar en cualquier lugar, solo lleva entre 10 y 15 minutos completarla, y los cuatro formularios intercambiables están diseñados para reducir los efectos de aprendizaje de las pruebas recurrentes a lo largo del tiempo. Los dominios cognitivos evaluados con la prueba de 11 ítems incluyen orientación, lenguaje, cálculos, memoria, abstracción, función ejecutiva y habilidades de construcción. “Cada vez que alguien note un cambio en su función cerebral o personalidad, debe realizar esta prueba”, asegura Scharre. “Si esa persona se hace la prueba cada seis meses y su puntuación baja dos o tres puntos durante un año y medio, esa es una diferencia significativa, y el médico puede usar esa información para avanzar en la identificación de las causas de la pérdida cognitiva y para tomar decisiones sobre el tratamiento”.