El Departament de Salut trabaja para dar una respuesta contundente al aumento de casos por coronavirus en Catalunya. El encargado de confirmarlo ha sido el director del IrsiCaixa y jefe del Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Germans Trias i Pujol, Bonaventura Clotet: "Se trabaja para instalar carpas al lado de los ambulatorios y hacer pruebas masivas de PCR", en declaraciones a Betevé. Estas nuevas instalaciones se situarán en aquellas zonas donde el rebrote de la pandemia sea más acentuado: "Estará por barrios determinados donde tan pronto como pase se pueda hacer la prueba".

Clotet calcula que este sistema podrá entrar en funcionamiento dentro de quince días. Primero, tendrá que pasar un protocolo, someterlo a aprobación y ver si es factible. De momento, se destinarán a la comarca del Barcelonès, para coger el Área Metropolitana, y en la parte norte del Maresme aunque "se podría aplicar a otras zonas donde haya descontrol". De esta manera, se conseguiría uno de los objetivos que tanto Clotet como el epidemiólogo Oriol Mitjà llevan insistiendo desde el inicio de la pandemia: ir por delante del virus. El sistema medirá qué áreas tienen un porcentaje más alto de crecimiento y se peinarán todas las zonas con tests masivos.

Este sistema sigue el de otros países como Corea del Sur. El país asiático consiguió reducir de forma radical el número de contagios y ha sido una referencia ejemplar. Su programa se basa en la prevención con analíticas, llamamiento a la responsabilidad individual y uso de nuevas tecnologías y sistemas de aplicaciones. Corea del Sur se sitúa en cifras tan sólo superiores a los 10.000 positivos junto con Austria o Dinamarca.

Mientras que en Catalunya, los datos no hacen prever ninguna esperanza. Los nuevos casos declarados de coronavirus han alcanzado este jueves la cifra más alta desde el final del estado de alarma e iguala la de finales de marzo. Aunque buena parte de estos son evidencias de tests serológicos -es decir, pueden ser positivos de semanas o incluso meses atrás- se suman 1.949 personas contagiadas. De estos, 1.297, es decir, el 66%, corresponden a Barcelona y el área metropolitana, mientras que el 17,5% son casos detectados en el Segrià. El cómputo global desde el inicio de la crisis sanitaria se sube, pues, hasta los 86.891.