"Os ruego que dejéis que os ayuden expertos externos". Esta es la súplica del epidemiólogo Oriol Mitjà al Govern de Catalunya después de que este anunciara nuevas restricciones para frenar la expansión del coronavirus.

Mitjà ha asegurado estar "cansado, frustrado y avergonzado" con la gestión de la crisis sanitaria derivada de la Covid-19. El epidemiólogo añade que estos sentimientos le vienen "no sólo por las medidas de hoy", sino también por "las vacunas, la rave, la Navidad, las residencias, los antígenos, ferrovial, y un larguísimo etcétera".

Las nuevas restricciones

El Procicat aprobó este lunes el confinamiento municipal durante 10 días a partir del 7 de enero, así como el cierre del comercio no esencial los fines de semana. Además, cerrarán todos los días los centros comerciales, las tiendas de más de 400 m2 y los gimnasios. Sólo se permitirán las actividades deportivas al aire libre.

El ocio queda suspendido, así como la mayoría de las extraescolares. Sólo se podrán realizar las que mantengan el mismo grupo de convivencia de la escuela y se hagan en el propio centro. La restauración y la cultura, en cambio, no suman nuevas restricciones. El retorno escolar se mantiene en el día 11 de enero. "Serán 10 días para parar el país con un nuevo paro social", resumió la consellera de Salut, Alba Vergés.

Las vacunas

Hay mucha polémica en torno a la estrategia de vacunación en Catalunya cuando hace más de una semana que empezó la campaña. Una semana después de que se administrara la primera dosis de la vacuna en Catalunya, sólo se han puesto 6.000 vacunas de las 60.000 que han llegado.

Según TV3, uno de los objetivos de la campaña es vacunar a 104.000 personas entre usuarios y personal de las residencias de personas mayores durante las dos primeras semanas. Pero cuando menos, el ritmo de vacunación no es el que se esperaba: en seis días, sólo se han puesto 6.093 vacunas. Una de las críticas de Mitjà es en este sentido; el epidemiólogo se ofrece a ayudar al Govern para poder vacunar a más gente.