Nuestras emociones tienen una relación importante con la alimentación que llevamos a cabo, tal y como han demostrado numerosos estudios. Pero en el caso de las mujeres, esta relación podría ser más profunda. Así ha quedado de manifiesto en una investigación llevada a cabo por la Universidad de Binghamton de Nueva York y dirigida por Lina Begdache, profesora de estudios de salud y bienestar, en la que se concluye que la salud mental de las mujeres probablemente tenga una mayor asociación con los factores dietéticos que la de los hombres.
Tal y como asegura Begdache, “ya había publicado anteriormente una investigación sobre la dieta y el estado de ánimo que sugiere que una dieta de alta calidad mejora la salud mental. Quería probar si la personalización de la dieta mejora el estado de ánimo entre hombres y mujeres de 30 años o más”.
Los expertos diseccionaron los diferentes grupos de alimentos que están asociados con la angustia mental en hombres y mujeres de 30 años en adelante, y también estudiaron los diferentes patrones dietéticos en relación con la frecuencia del ejercicio y la angustia mental. Los resultados sugieren que la salud mental de las mujeres tiene una mayor asociación con los factores dietéticos que la de los hombres. La angustia mental y la frecuencia del ejercicio se asociaron con diferentes patrones dietéticos y de estilo de vida, lo que respalda el concepto de personalizar los factores de la dieta y el estilo de vida para mejorar el bienestar mental.
“Encontramos una relación general entre comer sano, seguir prácticas dietéticas saludables, ejercicio y bienestar mental”, asegura Begdache. “Curiosamente, encontramos que para los patrones dietéticos poco saludables, el nivel de angustia mental era más alto en las mujeres que en los hombres, lo que confirmó que las mujeres son más susceptibles a una alimentación poco saludable que los hombres”.
Comer sano está asociado al bienestar mental, según el estudio
Según este estudio y otros, la dieta y el ejercicio pueden ser la primera línea de defensa contra la angustia mental en mujeres, explica la responsable del estudio. “La comida rápida, saltarse el desayuno, la cafeína y la comida de alto índice glucémico se asocian con la angustia mental en las mujeres maduras”, afirma Begdache. “Las frutas y las verduras de hoja verde oscuro están asociadas con el bienestar mental. La información adicional que obtuvimos de este estudio es que el ejercicio redujo significativamente la asociación negativa de la comida con alto índice glucémico y la comida rápida con la angustia mental”, asegura.
Esta investigación proporciona el marco necesario para que los profesionales de la salud personalicen planes dietéticos para promover el ejercicio y mejorar el bienestar mental en adultos maduros. También podría proporcionar una nueva perspectiva para la comunidad de investigadores al evaluar el papel de la dieta en la angustia mental. Los investigadores están llevando a cabo un estudio paralelo con hombres y mujeres jóvenes, analizando la calidad de la dieta además del sueño y las variables de cambio estacional desde una perspectiva longitudinal.