Los hospitales catalanes del grupo Quirónsalud han atendido hasta finales de abril a unos 4.800 pacientes ingresados por coronavirus, lo que supone el 18% de la población hospitalizada por Covid-19 en Catalunya: casi uno de cada cinco ingresos.

Los hospitales del grupo en Catalunya han registrado cerca de 3.600 altas, informa el grupo en un comunicado, en el que también destaca que trabaja en coordinación con las autoridades sanitarias catalanas.

Derivados de residencias

La edad media de hospitalizados en los centros de Quirónsalud ronda los 65 años, con un 28% de mayores de 75; muchos de ellos, derivados de residencias de mayores, principalmente hacia el Hospital Universitario Sagrado Corazón y al Hospital General de Catalunya.

Quirónsalud ha valorado su "significativa" contribución a afrontar la avalancha de pacientes, para lo cual aumentó su capacidad de camas en cerca de 350: unas 200 para hospitalización convencional y unas 150 para cuidados intensivos, unidades a las que también ha destinado más de 100 nuevos respiradores. El grupo ha reforzado la plantilla en sus hospitales de Catalunya con la contratación de casi 700 profesionales.

El grupo hospitalario considera que tanto la sanidad pública como la privada "se han visto fuertemente impactadas y han colaborado como nunca" para superar la crisis. Sobre la pública catalana, constata que ha experimentado la mayor tensión de su historia y augura que "no volverá a la normalidad hasta bien entrado 2021", ya que las listas de espera para pruebas diagnósticas y operaciones no urgentes -entre otras prácticas- se han alargado aún más de lo previsto antes de la crisis.

Reconocimiento

En cuanto a la privada, asegura que "también ha realizado un esfuerzo titánico" y destaca que así lo ha reconocido la Generalitat al concretar medidas presupuestarias para compensar al sistema de salud privado por ese esfuerzo. Catalunya se ha mantenido como la segunda comunidad más afectada, con cerca del 23% de la población española afectada por coronavirus y que han sido atendidos por los sanitarios.

La conclusión de Quirónsalud es que desde el primer momento se hizo patente la necesidad de "reforzar a contrarreloj" la asistencia hospitalaria en toda España, poniendo a prueba todo el sistema sanitario. "El esfuerzo realizado también por la sanidad pública y privada de Catalunya en particular para aumentar la atención a infectados, así como la hospitalización de pacientes graves, ha sido excelente desde el inicio", sostiene el grupo