El hecho de que los champús, acondicionadores de cabello y geles de baño que utilizamos para la ducha sean cada vez más específicos y ricos en propiedades para nuestro cuerpo, no significa que no contengan químicos peligrosos.
Cuando se hace referencia a productos de baño limpios, significa que se han creado teniendo en cuenta su repercusión para el medio ambiente y para nuestro cuerpo. Estos productos limpios están libres de ciertos químicos llamados disruptores endocrinos, que pueden causar más daño del que se pueda pensar. De hecho, está científicamente demostrado que aquellas personas que escogen productos que no contienen disruptores endocrinos, tienen niveles de estos químicos mucho menores en su organismo.
Los champús, acondicionadores de cabello y geles de baño que utilizamos pueden contener químicos peligrosos
El estudio
Los disruptores endocrinos pueden alterar las hormonas del cuerpo y provocar problemas de salud como trastornos reproductivos, enfermedades de la tiroides, asma y determinados tipos de cáncer. En un nuevo estudio, los investigadores evaluaron la influencia de diferentes tipos de productos de baño en la exposición de las personas.
Se recogieron muestras de orina de 726 participantes, que fueron analizadas en busca de 10 disruptores endocrinos comunes. Según el informe publicado en la revista International Journal of Hygiene and Environmental Health, los investigadores encontraron que el 87 por ciento de los participantes estaban tomando medidas para evitar ciertos químicos en los productos.
Cuando los investigadores compararon a los participantes entre sí, encontraron que las personas que evitaban los productos con parabenos, triclosán y fragancias tenían el doble de probabilidades de estar en el grupo con la carga corporal más baja de todas las sustancias químicas combinadas.
Carga corporal es un término que se utiliza con frecuencia para referirse a la cantidad de sustancias químicas a las que una persona puede estar expuesta o los niveles de ciertas sustancias químicas en el cuerpo.
Los peligrosos químicos
Si bien las personas que intentaron evitar ciertos productos químicos tenían menos probabilidades de tener signos de estos productos químicos en su sistema en general, esto no sucedió con todos los productos químicos.
Los investigadores encontraron que aquellos que intentaron evitar los productos que contienen bisfenol A (BPA) al no comer alimentos en envases de plástico o beber de latas de metal todavía tenían niveles similares a los que no evitaron el químico. Esto significa que estos productos químicos se consumen de otras formas que la gente puede no conocer.
Los químicos que los investigadores probaron incluyeron parabenos, BPA, triclosán y benzofenona-3. Los parabenos son uno de los conservantes más utilizados en productos farmacéuticos cosméticos y se absorben fácilmente en el cuerpo humano. Están asociados con actividad endocrina, carcinógenos, infertilidad, espermatogénesis y trastornos psicológicos y ecológicos.
Para saber si un producto contiene parabenos, busca en su etiqueta términos como metilparabeno, propilparabeno, isoparabeno o butilparabeno.
El BPA o bisfenol A se utiliza para fabricar plásticos de policarbonato y resinas epoxi, que se encuentran en muchos envases. También se encuentra en artículos de tocador y productos de higiene femenina. Es un químicos que puede interactuar con los receptores de hormonas, como los de la tiroides, pudiendo alterar su función. El BPA se encuentra en el plástico de policarbonato y se usa a menudo en contenedores que almacenan alimentos, bebidas y bienes de consumo.
Por su parte, el triclosán es un agente antimicrobiano que se usa en productos para el cuidado personal. Se absorbe fácilmente en la piel, y puede provocar problemas reproductivos y también puede afectar la respuesta inmunitaria y la función cardiovascular.
El BPA o bisfenol A se encuentra en la composición de muchos envases
La benzofenona-3 se utiliza en protectores solares y cosméticos por su protección contra los rayos ultravioleta. Es una sustancia química que está involucrada en la interrupción del sistema hipotalámico-pituitario-gonadal, que regula el sistema inmunológico y reproductivo.
Otro químico que los expertos sugieren evitar son los ftalatos. Los ftalatos son sustancias químicas que alteran el sistema endocrino y que se asocian con la pérdida del embarazo y los resultados obstétricos adversos. Aparecen en los esmaltes de uñas, lacas para el cabello, lociones para después del afeitado, jabones, champús y perfumes, entre otros.