La consellera de Salut, Alba Vergés, ha destacado este viernes que su departament quería implementar medidas más restrictivas de cara a Navidad para frenar la propagación de la Covid-19, pero que se encontró la oposición de otros miembros del Govern. "Desde Salut pedimos medidas más restrictivas, pero eso es un debate que mantenemos en el marco del Govern", ha manifestado Vergés en una rueda de prensa dónde se ha presentado la nueva unidad de pediatría de la Vall d'Hebron.
En este sentido, ha apuntado que a la hora de tomar nuevas medidas no solo se puede tener en cuenta la evolución de la pandemia, sino la crisis socioeconómica que se desprende y el estado emocional de la ciudadanía. "Sabemos que una medida restrictiva funciona seguro, pero tenemos que tener en cuenta otras cosas", ha puntualizado la consellera.
Un grupo de personas en la feria de Santa Llucía / Europa Press
Luz al final del túnel
Por otra parte, ha explicado que Catalunya espera recibir las primeras vacunas contra la Covid-19 el próximo 27 de diciembre y, a partir de aquí, ya tienen la campaña programada para empezar a suministrar las primeras dosis a las personas más vulnerables o colectivos de riesgo. "Tenemos un espejismo, hay luz al final del túnel, pero todavía tenemos que hacer esfuerzos", ha apuntado a la consellera que ha pedido a la ciudadanía que cumpla las medidas adoptadas por la Generalitat con el fin de doblar la curva de nuevos casos que es ascendente.
Entre las nuevas restricciones, que entraran en vigor el lunes, se incluye la limitación a diez personas y a dos grupos de convivientes los encuentros de Navidad, mientras que la Nochebuena y la de Fin de Año se implementará el toque de queda nocturno empezará a la una de la madrugada. "El más relevante es la combinación entre personas. Restringimos las burbujas. Nos hemos basado en eso y no en el número de personas que se puede encontrar", ha señalado Vergés.
También se contempla que la restauración solo abra en una franja horaria de mañana, de 7.30 a 9.30 horas, y de mediodía, 13 a 15.30 del mediodía, mientras que de siete hasta las diez de la noche podrán hacer comida para llevar si se recoge al local o hasta las 23:00 horas si la entrega es a domicilio. Además, los gimnasios y restaurantes o bares que se encuentren dentro de un centro comercial permanecerán cerrados.
"Quiero dar la mano a los sectores afectados por las medidas. Pero estamos en unos momentos principales de la epidemia, no sólo por las fechas de Navidad, sino también porque iniciamos la campaña de vacunación. Tenemos que intentar reducir la transmisión del virus", ha indicado la consellera que ha asegurado que el Govern está haciendo todo el posible para ayudar los sectores afectados por las restricciones.
El Ejecutivo catalán ha tomado estas medidas restrictivas, ya que a tan solo una semana de Navidad, la situación epidemiológica está disparada. Al detalle, el riesgo de contagio se sitúa en 1,41 el de rebrote supera los 300 puntos, mientras que los nuevos contagios llegan a 2.252 en un solo día. Todo, mantiene la presión asistencial en los hospitales, según ha informado hoy el departament de Salut.