La presidenta del Consell de Menorca, Susana Mora, ha anunciado este miércoles que la isla pasará al nivel 4 el próximo sábado y adelantará el toque de queda a las diez de la noche para intentar frenar la pandemia de la Covid-19. Por su parte, la consellera de Salud, Patrícia Gómez, ha especificado que esto aprobará el viernes en un Consell de Govern extraordinario y las medidas entrarán en vigor el sábado.

El gobierno local adopta estas restricciones, después que se haya registrado un incremento de casos de coronavirus, especialmente, a partir del 8 de enero. Mora ha avanzado que se han contabilizado 46 positivos en las últimas 24 horas y que hay ocho personas hospitalizadas, cinco de ellos en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

consellera de salut de menorca Patricia GómezLa consellera de Salut, Patrícia Gomez, de Menorca / EFE

Cierre del interior de los bares

Entre las medidas más destacadas del nivel de alerta 4 pasan por un avance del toque de queda a las 22.00 horas, así como el cierre de los interiores de los restaurantes y bares y la limitación de las reuniones a dos unidades de convivencia con un máximo de seis personas, tanto en interior, como en exterior.

De momento, estas medidas se aplicarán hasta el 29 de enero cuando se revisará la situación de la pandemia en Menorca. "Tenemos que proteger la salud de los menorquines, hemos de proteger el sistema sanitario y el sistema educativo", ha recalcado Mora.

Además, ha señalado que la isla entra en una "situación compleja y muy dura, tanto en parámetros de salud, como a nivel socioeconómico". Ahora bien, ha defendido que estas medidas son "imprescindible" para "salir reforzados, sobre todo, de cara a la próxima temporada turística", ha manifestado la Mora.

En esta misma línea, Gómez ha resaltado que "la situación de Menorca en los últimos días no es buena", por lo que ha añadido: "Estamos llegando a máximos históricos". En este sentido, ha detallado que la incidencia acumulada es de 334 casos de nuevos positivos de coronavirus por cada 100.000 habitantes en 14 días.

La consellera se ha referido en concreto al brote familiar y social en Mahón, que ya afecta a 29 personas y que tuvo su origen en un restaurante la noche de fin de año. "El restaurante cumplía todas las medidas de seguridad, el problema es que las personas que van a los restaurantes se relajan y no llevan mascarillas, lo que facilita los contagios", ha subrayado.