El Ayuntamiento de Tarragona ha advertido a los propietarios de los establecimientos del sector de la hostelería y de la restauración de la ciudad que les retirará la autorización para instalar terrazas a la vía pública si no cumplen con las restricciones establecidas en el plan de desescalada por el coronavirus del Gobierno.

El consistorio ha acordado que el incumplimiento de las medidas supondrá una falta grave que se sancionará con una multa.

En el caso de una segunda advertencia, los establecimientos perderán el derecho de ocupación del espacio público y no lo recuperarán hasta que se acaben las restricciones por la crisis sanitaria del coronavirus.

El Ayuntamiento recuerda que las terrazas no pueden superar el 50% del aforo y que las mesas tienen que mantener los dos metros de distancia de seguridad.

En caso de que no se pueda garantizar, el número de mesas tendrá que ser inferior y siempre dentro de la superficie autorizada. Además, el consistorio también señala que si la mesa reúne a diez personas, los locales tienen que mantener la distancia interpersonal.