La ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) ha anunciado este lunes que deja de intervenir directamente en la emergencia del coronavirus en España, después de la mejora de las cifras médicas y asistenciales. Durante estos dos meses, la organización ha asesorado autoridades y profesionales de la salud, ha contribuido a aumentar la capacidad de los hospitales mediante la instalación unidades temporales de hospitalización, y ha dado apoyo en residencias de personas mayores para contribuir a la atención que los mayores reciben en estos centros.

MSF reitera su llamamiento a las administraciones para que mantengan la vigilancia e inviertan los recursos necesarios para conseguir un control efectivo de la epidemia y evitar nuevos brotes. Asimismo, la organización considera imprescindible que se responda a las necesidades de las personas mayores en las residencias y que la protección del personal sanitario y no sanitario que continúa en la primera línea sea una prioridad, incluida su salud emocional.

MSF sigue trabajando en esta pandemia fuera de España y enfoca sus esfuerzos, sobre todo, en contextos con sistemas de salud frágiles y con poblaciones vulnerables amenazadas por la pandemia del coronavirus, así como por otras emergencias.

Los ejes de la intervención

Uno de los ejes principales de la intervención de MSF ha sido el asesoramiento técnico y la formación de personal de las residencias de personas mayores, un esfuerzo destinado a contribuir a la atención que reciben las personas que residen en estos centros. MSF ha dado apoyo además de 500 residencias en 12 comunidades autónomas, asistiendo a miles de profesionales en el ejercicio de sus tareas.

También ha dado asesoramiento personalizado, gratuito y confidencial y ha habilitado una web especializada para responsables de las administraciones, equipos de supervisión y formación y profesionales de la salud o del cuidado de personas afectadas por la covid-19. Esta web, que se mantendrá activa en los próximos meses, ofrece documentos y vídeos sobre protocolos, circuitos en residencias para evitar contagios, seguimiento de contactos, control de infecciones en hospitales y atención primaria o uso de EPI (equipos de protección individual). MSF seguirá brindando asesoramientos puntuales cuando sea requerido.

En las primeras semanas de la emergencia, MSF se puso a disposición de las autoridades y del personal de la salud y contribuyó a aumentar la capacidad de hospitales con unidades de hospitalización temporales ubicadas dentro o fuera de los recintos hospitalarios, por ejemplo en pabellones deportivos, para atender pacientes de covid-19.

En estas estructuras, MSF ha asesorado directamente al personal sanitario, centrándose, entre otras cosas, en el control de infecciones. Los equipos de la organización han ayudado a planificar una treintena de extensiones hospitalarias y a montar directamente cuatro de estas unidades temporales de hospitalización en Madrid y Barcelona con un total de 360 camas para contribuir a descongestionar las urgencias en los momentos más críticos en las zonas más afectadas, como la Comunidad de Madrid y Catalunya.