El coronavirus, que podría haber saltado a los humanos desde los animales, se extiende cada vez más rápido. Estos patógenos se han identificado recientemente y las medidas exhaustivas de salud pública y coordinadas son las mejores armas para mantener los brotes a raya. Pero no son las únicas.

Aunque hace meses que escuchamos la palabra coronavirus o Covid-19, todavía no se sabe cuál es la forma precisa de contagio. Ahora bien, por otras infecciones causadas por virus similares parece que la forma de transmisión sería por contacto estrecho con las secreciones respiratorias que se generan con la tos o los estornudos de una persona enferma. Estas secreciones infectarán a otra persona si entran en contacto con la nariz, los ojos o la boca.

Por lo tanto, el contacto es de persona a persona. Las gotas con el virus también se pueden depositar en diferentes superficies y objetos. Al tocarlos, se pueden incorporar a las manos, hecho que es potencialmente infeccioso si la persona después se toca la boca, la nariz y posiblemente los ojos con esa misma mano, según indican varias consejerías de Salud del Estado.

Las autoridades sanitarias insisten, sin embargo, que el Covid-19 es contagioso incluso antes de mostrar síntomas.

¿Cómo protegerse?

Las medidas genéricas de protección individual pasan por realizar una buena higiene de manos, lavarlas frecuentemente con agua y jabón o soluciones alcohólicas, especialmente después del contacto directo con personas enfermas o su entorno.

También se recomienda evitar el contacto con personas que muestren signos de afección respiratoria, como tos o estornudos, y mantener una distancia de un metro aproximadamente con las personas con síntomas de infección respiratoria aguda, taparse la boca y la nariz con pañuelos de un solo uso o de tela al toser o estornudar. Estas medidas, además, protegen ante otras enfermedades más frecuentas, como la gripe, y en principio, no es necesario tomar precauciones especiales con los animales.

¿Los animales transmiten el coronavirus?

De momento, no se ha podido demostrar que los animales puedan transmitir el coronavirus. Hoy por hoy, no hay datos que indiquen que las mascotas como los perros o los gatos se hayan infectado o puedan propagar el virus.

En caso de que una persona esté infectada por el virus, se sabe que hay que evitar el contacto con su mascota. Si no es posible, hay que lavarse las manos antes y después de interaccionar con ella y llevar puesta una mascarilla.