Los sindicatos SATSE-FSES, FSS-CCOO, UGT, CSIF y CIG-Saúde han convocado huelga en la sanidad pública cada martes a partir de enero contra el Estatuto Marco, la ley básica que regula las relaciones laborales de los profesionales del Sistema Nacional de Salud (SNS). Será a partir del próximo 27 de enero, según ha anunciado este jueves Begoña Ballell, secretaria estatal del Sector Salud de UGT Servicios Públicos, en una rueda de prensa en la que han denunciado la falta de intención de la ministra de Sanidad, Mónica García, de llegar a un acuerdo "justo, útil y beneficioso para todos los trabajadores y trabajadoras sin excepción ni privilegios entre colectivos profesionales".
Tras casi tres años de negociación, los sindicatos han criticado que el Ministerio que dirige García "no tiene intención de pactar un texto de la nueva ley que realmente beneficie al conjunto del personal estatutario, sin excepciones y sin discriminaciones entre colectivos profesionales". "El Ministerio de Sanidad ha rechazado alcanzar un acuerdo para aprobar un Estatuto Marco en el que tengan cabida todos los profesionales. Tras casi tres años de negociaciones, Sanidad no tiene intención de acordar un Estatuto Marco justo, útil y beneficioso para todos los trabajadores, sin privilegios entre colectivos profesionales", ha señalado Ballell.
Molestos por las negociaciones con los médicos
Esta referencia a los "privilegios" hace referencia a las "negociaciones paralelas" que ha hecho Sanidad con los médicos, que tampoco están contentos con el Estatuto Marco: en Catalunya, Metges de Catalunya ha convocado huelga para los días 9 y 10 de diciembre, y 14 y 15 de enero; en el resto del Estado, los sindicatos médicos CESM y SMA también han convocado cuatro días, del 9 al 12 de diciembre. Volviendo a la huelga indefinida convocada este jueves, el presidente del sector nacional de Sanidad de la CSIF, Fernando Hontangas, ha subrayado que la negociación ha sido "vulnerada y violada" por parte del Ministerio: "Las negociaciones paralelas del Ministerio (con los sindicatos médicos) nos parecen una violación del espacio legitimado". Hay que tener en cuenta que los médicos quieren un estatuto independiente del resto de profesionales del sistema sanitario.
En este sentido, los sindicatos consideran que Sanidad "ha entorpecido y dilatado la negociación, manteniendo y alimentando un proceso paralelo con organizaciones ajenas al ámbito de negociación, ignorando a quien representamos el 100% del personal estatutario del Sistema Nacional de Salud". Ballell ha considerado que el Ministerio se ha inhibido de promover la ley y ha mostrado "debilidad en el gobierno de coalición, que cuando tiene voluntad, impulsa, desarrolla y aprueba cualquier proyecto informativo". Así, han lamentado que la última reunión fue el 6 de noviembre, poco después de una manifestación el primer de octubre, y que no han conocido más detalles del texto: "No nos han entregado el último borrador, nos dijeron que nos darían una nueva cita para abordar la clasificación y retribuciones. Seguimos a la espera". "La actitud del Ministerio es de determinada deslealtad al ámbito de la negociación", ha insistido la presidenta de Satse, Laura Villaseñor
Qué quieren los sindicatos en el Estatuto Marco
Lo que quieren los sindicatos es mejorar las condiciones laborales de todos los trabajadores del SNS, sanitarios y no sanitarios, "sin excepciones, sin privilegios y sin distorsiones". Ahora bien, consideran que Sanidad continúa sin aclarar cuestiones como la jubilación anticipada, la reclasificación profesional o la jornada de 35 horas en todo el territorio nacional. García aseguró que el Estatuto Marco estaba negociado en más del 99%, una afirmación que los representantes de los profesionales no toleran. Por ejemplo, explican que el Ministerio continúa sin querer llegar a un acuerdo en lo que respecta a las retribuciones básicas. Los sindicatos también pretenden establecer las bases en la norma para una jornada laboral "digna y adecuada", que concilie la vida familiar y laboral del personal, además de otros aspectos relacionados con esta materia esencial en las relaciones de trabajo, y que se posibilite acceder a la jubilación anticipada y parcial de manera voluntaria.
Villaseñor ha reconocido que una huelga no es "agradable para nadie", pero ha llegado el momento en el que "las circunstancias y el desarrollo de la negociación" les han obligado a tomar la decisión. Además, han lamentado que un gobierno que se autodefine como progresista y defensor de la sanidad pública es el único que ha tenido el "dudoso honor" de conseguir un frente común sindical para una huelga general. "Hacemos una llamada yermas a todos los trabajadores del Sistema Nacional de Salud, ya que la unidad hace la fuerza y solo desde la movilización conseguiremos un Estatuto Marco que permita avanzar y garantizar un servicio sanitario sólido, moderno y capaz de responder a las necesidades de la ciudadanía. Este es un momento decisivo, no nos han dejado otra alternativa y responderemos con toda la determinación necesaria", ha concluido Ballell.
Imagen principal: la manifestación de profesionales de la sanidad del pasado primero de octubre contra el Estatuto Marco / Europa Press