Expertos de diversos países se han expresado en los últimos días acerca del posible efecto del alcohol sobre la vacuna de la Covid-19. Mientras que en Rusia y el Reino Unido han advertido de que las personas deben evitar beber alcohol durante un breve período de tiempo antes de vacunarse contra el nuevo coronavirus, en Estados Unidos alegan que el consumo ocasional o moderado de alcohol no afectará la respuesta inmunológica.
Según los investigadores del Reino Unido, “es necesario que el sistema inmunológico funcione al máximo para tener una buena respuesta a la vacuna, por lo que si está bebiendo la noche anterior o poco después, podría ser contraproducente”. Por lo tanto, aconsejan que las personas eviten el alcohol los días antes y después de recibir la vacuna.
En Rusia incluso se ha llegado más lejos, aconsejando que los ciudadanos que se vacunen con la vacuna Sputnik V que se ha desarrollado en el propio país, se abstengan de consumir alcohol durante dos meses, aunque el desarrollador de la vacuna, Alexander Gintsburg, aseguró que bastaba con abstenerse de consumir alcohol tres días después de cada inyección.
Dr Gintsburg, the developer of #SputnikV, comments on fake news re. 42 days of alcohol abstinence: We’re not talking about a complete ban on alcohol, moderate consumption is allowed. We advise refraining from alcohol for 3 days after each injection, which applies to all vaccines. pic.twitter.com/qcFFzELqMw
— Sputnik V (@sputnikvaccine) December 9, 2020
En Estados Unidos, muchos expertos han alegado que el consumo excesivo de alcohol es una preocupación para la salud en general, y no creen que sea necesario alertar de que las personas deban evitar beber cantidades moderadas o ocasionales de alcohol antes de vacunarse, puesto que esta circunstancia no se evaluó como una variable en el gran ensayo clínico de fase 3.
La razón de la advertencia es que, aunque todavía no hay datos específicos sobre el alcohol y la vacuna Covid-19, la mayoría de los datos disponibles sobre cómo el alcohol afecta el sistema inmunológico y las respuestas a las vacunas sugieren que lo mejor sería no hacerlo durante, al menos, una semana antes de la primera dosis y un mes después de la segunda.
El consumo de 15 o más bebidas a la semana para los hombres y ocho o más bebidas a la semana para las mujeres se considera un consumo excesivo. En estas circunstancias se produce una desregulación funcional de muchas células inmunes al mismo tiempo que se produce un aumento en la inflamación en todo el cuerpo.
El consumo de alcohol provoca inflamación en el cuerpo
Los estudios de investigación han demostrado que el alcohol puede causar inflamación en el intestino y puede alterar la composición del microbioma, dañando potencialmente los microorganismos que mantienen la salud del sistema inmunológico. El consumo excesivo de alcohol también se asocia con una serie de otros problemas de salud, incluido un mayor riesgo de enfermedad cardíaca, cáncer y enfermedad hepática.