El Hospital Clínic de Barcelona ha aplicado una nueva técnica para localizar y extirpar tumores no palpables mediante material radiactivo. Es el primer centro de Catalunya que ha utilizado esta técnica, que consiste en introducir el día antes una cápsula de titanio que contiene yodo 125 en la zona del tumor a través de una aguja.

Durante la intervención, los cirujanos, ayudados de profesionales de Medicina Nuclear, detectan la actividad radiactiva del yodo con una sonda y pueden extirpar la lesión de forma precisa y menos agresiva, sin lesionar tejido sano. La semilla contiene una "baja dosis de radioactividad", ha subrayado el doctor Sergi Vidal-Sicart, especialista en Medicina Nuclear, y no tiene riesgos para el paciente ni para los profesionales que la manipulan.

La cirujana Inmaculada Alonso ha resaltado que la precisión de la técnica permite minimizar el tejido sano que se extirpa y que las incisiones son de menos tamaño. Al mismo tiempo, ha dicho que esta técnica se puede aplicar también con metástasis a los ganglios linfáticos del axila, y en caso de que la quimioterapia haya tenido éxito, evitar el hueco completo y las posteriores secuelas que en muchos casos llevan a la extirpación.

En este aspecto, ha señalado que se podrían reducir hasta un 40% estos vaciados cumplidos. De momento se han operado once pacientes con cáncer de mama y uno con paratiroides.