Barcelona abrirá Centros de Atención Pimaria (CAP) de campaña para reforzar la atención primaria, según ha adelantado el programa Planta Baixa de TV3. 45 de estos CAPs ya están en marcha y se prevé que lleguen a unos ochenta.

Estos ambulatorios de emergencia podrán encontrarse tanto en edificios municipales, como centros cívicos, como en carpas en espacios públicos. La idea es ayudar a descongestionar la atención primaria y llevar a cabo actividades como la vacunación de la gripe y hacer las PCR.

El Ayuntamiento, dispuesto a ayudar

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha explicado que hace semanas que el consistorio traslada a la Generalitat y a la conselleria de Salut que están "dispuestos a ayudar". Colau ha recordado que, si bien el Ayuntamiento puede ayudar cediendo espacios, es el Govern quien tiene las competencias para reforzar con más profesionales.

En declaraciones en TV3, Colau ha insistido en su preocupación por la sobrecarga de los profesionales de la atención primaria asegurando que "hay falta de profesionales y que con los agentes Covid no es suficiente". De la misma manera, ha matizado que la atención telefónica de Salud no es lo bastante rápida ya que "la gente se pasa horas esperando a que les respondan desde las centralitas".

Restricciones y refuerzos

Ada Colau califica las últimas restricciones (el toque de queda y el cierre de la restauración) de medidas muy importantes que no se entienden si no van acompañadas de una serie de refuerzos. "Nosotros ayudaremos con lo que haga falta", ha subrayado la alcaldesa.

El toque de queda

El decreto del estado de alarma que el Gobierno aprobó ayer en un consejo de ministros extraordinario establece un toque de queda en todo el Estado entre las 23 y las 6, con margen para las comunidades autónomas de modificarlo una hora, tal como ha hecho el Govern.

Sobre esta nueva restricción, Colau ha apuntado que "la ciudadanía está cansada, triste y desmotivada ante las restricciones" y que, por lo tanto, "la mejor respuesta es demostrar que se hacen restricciones pero también refuerzos".

"A nadie le gusta el toque de queda, pero yo pido coherencia", ha concluido la alcaldesa antes de decir que "no se puede hacer un toque de queda donde la policía envíe a la gente a sus casas a las 22 h y que al día siguiente a las 8 de la mañana se haga un desahucio".