El Centro Europeo de Control y Prevención de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) ha actualizado este martes el número de afectados por el brote de botulismo en dos hospitales de Turquía, que ya se eleva a 67. En concreto, se han detectado 53 casos en Turquía, 12 en Alemania, uno en Austria y otro en Suiza, todos ellos pacientes que se sometieron a intervenciones médicas para perder peso entre el 22 de febrero y el 1 de marzo en centros médicos turcos. Las autoridades del país ya han clausurado los hospitales donde se hicieron estas inyecciones gástricas de toxina botulínica, mientras que el ECDC ha recomendado no viajar a Turquía para hacerse operaciones estéticas de este tipo. Entre los casos detectados, hay tanto de leves como de graves, e, incluso, algunos han requerido hospitalización e ingresos a Unidades de Cuidados Intensivos (UCI).

El organismo europeo solo ha facilitado información de 63 casos de botulismo, 60 de los cuales relacionados con un hospital privado de Estambul y tres con un hospital privado de la ciudad turca de Esmirna. En estos dos centros, según ha informado el ECDC, "se han suspendido las actividades de los departamentos pertinentes y se han abierto investigaciones contra las partes implicadas". En el comunicado, ha concretado que las primeras investigaciones llevadas a cabo por las autoridades turcas han revelado que en los tratamientos se han administrado productos de toxina botulínica "autorizados", pero que estos productos "no están aprobados para el tratamiento de la obesidad mediante inyección intragástrica".

El ECDC ha apuntado que todavía no se conoce la causa exacta de estos casos de botulismo. "En este momento no está claro si este suceso representa un problema terapéutico o de procedimiento en los hospitales implicados, o si hay un problema con el producto administrado", ha explicado. Hay que recordar que la inyección de toxina botulínica intragástrica en animales y humanos se utiliza, a veces, como tratamiento para la obesidad, aunque en el Estado español no está autorizada.

Recomendaciones del ECDC ante el botulismo

Las autoridades europeas han alertado de que todavía pueden salir más casos de botulismo, "teniendo en cuenta la posible variación en la presentación clínica de la enfermedad botulínica". Ante el riesgo, el ECDC ha pedido a los ciudadanos que eviten los tratamientos intragástricos con toxina botulínica para perder peso en Turquía. En esta línea, han asegurado que "actualmente se asocian a un riesgo significativo de desarrollar botulismo". También ha recomendado que todas las personas que hayan viajado a Estambul e Izmir para someterse a este tratamiento y presenten síntomas compatibles con botulismo que acudan al médico "cuanto antes mejor". Entre los síntomas destacan sensación de debilidad, así como la dificultad para respirar y tragar.

Casos de botulismo

Con respecto a los pacientes europeos que sufren botulismo, todos son adultos de mediana edad, 10 de los cuales recibieron el tratamiento en la misma clínica. Tres de los casos en Alemania recuerdan el nombre del producto utilizado en sus operaciones, y en todos coincidía. El caso de Austria es una mujer entre los 25 y los 44 años que recibió este tratamiento el 22 de febrero y, según ha explicado, la inyección fue "autoadministrada" en la misma clínica. La mujer fue hospitalizada con síntomas de botulismo, como ptosis, disfagia, disnea, debilidad en la garganta y debilidad muscular generalizada. Por otra parte, el caso de Suiza todavía no se ha podido confirmar y, de momento, sigue siendo sospechoso. Se trata de una mujer, en este caso de 45 a 64 años, que también recibió la inyección el 22 de febrero en la clínica sospechosa.