Las navidades no son unas fiestas agradables para mucha gente. La desaparición de seres queridos o la necesidad de celebrar cuando no se está pasando por un buen momento afectan al estado de ánimo y provocan que algunos sientan sobre todo tristeza y ansiedad. A esto se añade la situación de pandemia que vivimos desde hace casi dos años, el cansancio por las nuevas medidas y la imposibilidad de ver a determinado seres queridos. Estos son algunos consejos para hacer más llevaderas lo que resta de estas fiestas.

Aceptar la tristeza

A veces, se siente mucha presión por estar bien durante estas fechas, por la necesidad de tener que disfrutar y ser felices. Pero para los que no se sientan así, lo mejor que pueden hacer es no negar las emociones que generan estas fechas. Si a uno le ponen triste y amargado, no pasa nada, se acepta como tal sin que ello conlleve a sufrir ansiedad o a sentirse alguien raro.

Procurar no estar aislado

Entre la sensación de tristeza que provocan estas situaciones y la amenaza de la covid, a veces lo que apetece es meterse en casa y no relacionarse con nadie, encerrándose en un mismo. Una situación que se ha agravado tras el confinamiento y el miedo a contagiarse. Pero lo cierto es que, tomando las mayores medidas de seguridad, hay que procurar relacionarse en la medida de lo posible, aunque sea de forma telemática. Las relaciones sociales son fundamentales para mejorar los signos de tristeza y ansiedad.

Cuidar los horarios

El hecho de tener algunos días libres puede conducir a un cierto desorden en el día, lo que no favorece estados depresivos. Por eso es aconsejable mantener los mismos hábitos y rutinas que se pueda para evitar un estrés añadido.

Hacer ejercicio

El ejercicio tiene una acción crucial en estado de ánimo. Por eso, aunque a veces se dispone de menos tiempo, durante la Navidad hay que procurar seguir haciendo ejercicio con normalidad. Además, nos ayudará a controlar los excesos en cuanto a comida.

Dedicarse tiempo a uno mismo

Aunque en estos días se vive una vorágine, hay que tratar de buscar huecos para poder dedicarse unos minutos a uno mismo, bien sea para hacer una actividad relajante o para descansar en la medida de lo posible. Es una forma de encontrar la paz en estos días tan complicados para todos.