La hermana del exconseller encarcelado Josep Rull, Àngels Rull, ha sido designada como presidenta de una mesa electoral en las elecciones del 14-F, hecho que ha denunciado, ya que tiene que cuidar de su madre de 88 años. "Me echan a los leones", ha declarado.

El sorteo del Ayuntamiento de Terrassa ha designado a Àngels Rull, de 62 años, como presidenta de una mesa electoral, lo que supondría un riesgo para su madre de edad avanzada y con problemas de salud, según ha explicado en El món a RAC1.

"Yo tengo 62 y vivo con mi madre, que tiene 88 y delicados. Ahora tiene problemas respiratorios y hemos ido todos con mucho cuidado. En casa no viene nadie e intento que cuanta menos gente la vea, mejor. Y ahora me ha tocado eso de la mesa. Me lanzan a los leones", ha afirmado.

Se acogerá a las excepciones familiares

Entre las excepciones familiares para evitar ser miembro de una mesa hay dos que se podrían aplicar en este caso y, de hecho, ya está preparando las alegaciones.

Una de las excepciones va destinada a aquellos que tengan que cuidar de manera continuada de menores de 8 años o de personas con discapacidad física, psíquica o sensorial. La otra ampara a aquellos que tengan que tener un familiar hasta el segundo grado de consanguinidad o afinidad que por razones de edad, accidente o enfermedad no pueda valerse por sí mismo.

"Presentaré alegaciones, como sea. Aparte de por mi madre, por mí. Piensas que si coges eso las consecuencias que tiene son tremendas. Yo no puedo ir. No me la puedo jugar, ni por mí ni por mi madre", ha explicado Rull.

Considera que las medidas de seguridad no serán suficiente

Por otra parte, la hermana del exconseller ha declarado que las medidas de seguridad propuestas por el vicepresidente en funciones de presidente, Pere Aragonès, que incluyen tests de antígenos a los designados, mascarillas, pantalla facial, guantes y gel hidroalcohólico, no lo han convencido: "Cualquiera puede ir y tener el virus sin saberlo". "Y aunque nos pongan muy blindados, es fácil de encomendárselo. Da miedo, la gente va entrando, va saliendo, se encantan. Al conseller no me ha convencido mucho, la verdad," ha añadido.

 

Imagen principal, Josep Rull / Sergi Alcàzar