El president en el exilio, Carles Puigdemont, ha reaccionado con ironía en los aires de homenaje que ha tenido la exhumación del dictador Franco, organizada por el Gobierno.

"Al final les ha quedado una verdadera exhumación de Estado", ha indicado Puigdemont, aludiendo al hecho de que la voluntad inicial de realizar un acto antifranquista ha resultado un fiasco.

"Han tardado 44 años a sacar a Franco. Y han tardado 8 años desde que una comisión de expertos emitió la recomendación sobre esta gloria del nacionalcatolicismo que es el Valle de los Caídos. A ver cuándo tardan a sacar a los herederos que Franco designó. O ya les está bien así", ha añadido.