Después de conocerse la sentencia al juicio al procés, muchas personalidades del mundo político internacional han reaccionado al veredicto. Este es precisamente el caso de la diputada alemana en el Bundestag de Die Linke, Zaklin Nastic, que en una entrevista asegura que es una "locura" y constata que el veredicto subraya "la profunda crisis de la democracia española".

¿Qué opina de la sentencia?

En total hasta 100 años de prisión, castigos draconianos en forma de nueve a trece años en cada caso. Esto es una locura y tiene muy poco que ver con la jurisdicción razonable. No lo puedo decir de otra manera, estos veredictos son una vergüenza para los principios fundamentales del estado de derecho. Y también señalan la profunda crisis de la democracia española. Este hecho deja visible que la no independencia judicial no sólo pasa en países de la Europa del Este. Las acciones del juzgado tenían como objetivo intimidar a la gente. Pero el impacto final ha sido todo lo contrario. Una gran protesta legítima se organizó inmediatamente. España tiene un problema de ley y orden: del lado del estado español, y no la fuerza de los manifestantes pacíficos. Está visto que quien quiera solucionar el problema político en España a través de la justicia inevitablemente fracasará.

¿Cómo ve la situación actual en Catalunya?

Es una situación de protestas masivas, un impulso increíblemente importante para la democracia y una demostración muy fuerte contra la justicia y la política española. En mi opinión la imagen de un Tsunami Democràtic lo capta muy bien. La violencia policial y la brutalidad de la Guardia Civil se tienen que oponer y condenar de manera rigurosa. Si la UE es capaz de condenar la violencia policial y las duras prácticas en las cuales la policía apareció y actuó durante una manifestación en Rusia hace tres meses, y un portavoz de la jefa de política exterior de la UE, Federica Mogherini, dijo que las detenciones y el uso de violencia desproporcionada contra manifestantes pacíficos pisaron una vez más los derechos fundamentales de libertad de expresión y libertad de reunión, la UE tiene que poner a España –igual que a Francia con los chalecos amarillos y a Alemania con la actuación policial del G20– al mismo nivel que Rusia. Si no se hace eso, tenemos que entender claramente que es sólo por motivaciones políticas y utilizan dobles varas de medir.

¿Cree que la Unión Europea o algún país europeo tendría que mediar a fin de que ambas partes "se sentaran y hablaran"? (Sit and Talk)

Definitivamente. La negación constante del presidente Sánchez a sentarse con Torra, el presidente de Catalunya, es una parte de la intensificación del conflicto. Preferirían enviar al ejército en vez de entrar en un diálogo pacífico. La UE tendría que presionar para que se llevaran a cabo unas negociaciones cara a cara. Cualquiera que pierda la habilidad de dialogar es incapaz de construir la paz interna del país.

Las protestas son una demostración muy fuerte contra la justicia y la policia española

Las acciones de la justicia, policía y política española no son sólo un asunto interno. Exactamente como las reformas judiciales en Hungría y Polonia no son sólo asuntos internos. Está claro que no se puede pedir que la UE dé la independencia de Catalunya de España, pero se tiene que pedir que se garantice el cumplimiento del estado de derecho dentro de los países miembros. Si ni la Comisión Europea ni el Parlamento hacen eso tenemos que preguntarnos si la misma UE puede defender que esté basada en el estado de derecho y en los principios democráticos. También cuando se deniega la entrada en el Parlamento Europeo a Carles Puigdemont y Toni Comín. De nuevo, no podemos sólo mirar hacia el este en temas de derechos humanos, derechos democráticos y derechos civiles y políticos. El gobierno alemán también se tendría que comprometer con estos principios.

¿Cuál piensa que sería una "buena" solución para resolver el conflicto catalán?

Bueno, no estoy en la posición de proponer una solución óptima. Pero tal como he dicho antes, no se puede resolver el conflicto a través de la justicia sino en la mesa de negociación. También la criminalización de las protestas se tiene que acabar ahora mismo y además hay que combatir de manera efectiva los ataques de la extrema derecha y los nazis.