Con sus 52 diputados, Vox ha impregnado el ala derecha del Congreso con su discurso agitador. Sin despeinarse, sin levantar el tono, Santiago Abascal ha apadrinado el bautizo de "golpe de estado" a la investidura para un gobierno progresista de Pedro Sánchez. Durante la intervención de hoy, ha ampliado el espectro. Además del independentismo, ha disparado contra "las manadas de inmigrantes violadores" y la ley de violencia de género.

El líder de Vox ha arrancado su breve discurso sirviéndose del asesinato ayer en Esplugues, donde un hombre mató su pareja y su hija para construir su mensaje machista y racista. "A Vox nos preocupan todas las víctimas, independientemente del sexo y el autor". Y a partir de aquí ha empezado a enumerar toda una serie de agresiones y violaciones cometidas por "manadas de inmigrantes". De hecho ha apuntado que son ellos los principales responsables de dichos ataques.

En relación a la alianza del PSOE con Podemos y el independentismo, la ha calificado de "golpe de estado institucional", se ha quejado de que "el rebelde Torra no ha sido destituido porque -Pedro Sánchez- necesita el permiso de los golpistas" y ha afirmado que el aliado necesario para esta operación, "la compañía aseguradora de la investidura se llama ETA".