El ex comisario José Manuel Villarejo se queda gradualmente sin aliados, y más, ante la justicia. Los antiguos responsables de la Dirección Adjunta Operativa (DAO) de la Policía Nacional, Agustín Linares, Pedro Díaz Pintado y Eugenio Pino se han desvinculado de la estructura de la empresa que Villarejo utilizaba para sus negocios privados. Eso contradice lo que los tres firmaron el año 2018, cuando Villarejo estuvo en prisión provisional. En aquel contexto, los tres implicados firmaron una carta, a petición del abogado del ex comisario, que afirmar que "las empresas de Villarejo sirvieron a los intereses de la Policía sin recibir contraprestaciones". Esta afirmación, tan rotunda hace cuatro años, ahora la han matizado en el marco del juicio de Villarejo ante la Audiencia Nacional.

Entre los matices que los tres han argumentado para diluir la contundencia de sus firmas el año 2018 destaca la de Eugenio Pino, a quien ha afirmado: "Me dijeron que era para ponerlo en libertad condicional y firmé la carta sabrosamente (...) eso es el mínimo que podíamos hacer". Pino también ha destacado la tarea policial de Villarejo, pero a pesar de las alabanzas hacia el ex comisario cuando ha sido preguntado sobre las empresas de este, se ha limitado a afirmar que sabía que su familia tenía negocios, pero Villarejo afirmaba que no eran sedes.

Pino no ha sido lo único al afirmar que no conocía la actividad empresarial de Villarejo, Agustin Linares también ha asegurado que desconocía que se dedicara a "otro tipo de actividades" que no fueran las estrictamente policiales. Linares ha afirmado que sabía que Villarejo había tenido una serie de empresas, pero que cuando este volvió a la Policía Nacional dijo que "no estaba nada a su nombre, que lo dejaría en manos de su compañero." Un testimonio similar al de Pedro Díaz Pintado, quien ha asegurado: "Yo en aquella época no conocía la actividad del señor Villarejo, ni si estaba autorizada previa o posteriormente. En aquella época lo ignoraba".

La importancia de las firmas

En las cartas que firmaron los tres ex jefes del DOA el año 2018 se sostenía parte de la defensa de Villarejo. El ex comisario afirma que el entramado empresarial que orquestó sirvió para la "cobertura" de varios trabajos de agentes de policía y que sus responsables sabían de esta actividad. Las cartas sostienen esta versión, pero ahora que los tres firmantes han afirmado que solo firmaron para que Villarejo saliera de prisión, el ex comisario se queda sin uno de los soportes de su defensa.