Unas 2.000 personas se han manifestado este domingo por el centro de Girona en favor de la unidad de España y contra el gobierno de Carles Puigdemont. La marcha, convocada por la plataforma ciudadana Caminem Junts, ha transcurrido sin ningún incidente destacable, aunque se han escuchado constantes gritos pidiendo el encarcelamiento de Puigdemont. 

Una de las portavoces de la asociación, María Vázquez, ha explicado que lo que buscan es "poder convivir en paz", y, de hecho, ha asegurado que "no es fácil" mostrar su ideología en una ciudad como Girona, donde hay una mayoría independentista. Vázquez ha destacado también el carácter ciudadano de la manifestación. "Somos gente normal de la calle. No somos políticos", ha remachado.