El conseller Jordi Turull ha manifestado en declaraciones en El Nacional, en el octavo día de huelga de hambre en la cárcel de Lledoners, que ha constatado cómo las cosas no las valoras lo suficiente hasta que no las tienes o las pierdes. "Eso no vale para la comida, vale mucho más por la libertad. Hasta que no la pierdes, no la valoras lo suficiente: Cada instante, cada minuto, cada cosa que puedes decidir hacer", ha añadido.

"A menudo en el comedor, con los otros reclusos con los que comparto mesa, hacíamos bromas de quien pudiera estar comiendo ahora en este o aquel restaurante, o sencillamente algún buen plato de lo que comes en casa. Ahora en mi cabeza sólo pienso en llamar a casa", ha indicado.

Turull ha afirmado que hoy cuándo se ha levantado se ha notado "más débil que lo habitual, pero "curiosamente a lo largo del día" se ha ido recuperando bien. "He pasado por la enfermería y las constantes están bien, nada que salga de lo que es esperable".

WhatsApp Image 2018 12 08 at 22.41.43

El conseller ha bromeado con la comida que estaba prevista hoy en la cárcel, porque no lo ha podido probar y se ve que era su preferida. "Hoy los que me conocen saben cómo he sufrido, porque para comer había macarrones y pollo...", ha bromeado. También ha explicado que una persona que no conoce personalmente le envió "para dar ánimos" una fotografía de sus hijas que ponía: "Ánimos, papa, te queremos". "Al verlo me emocioné. ¡Muchas gracias, Dolors!", ha indicado.

Turull ha tenido hoy una sesión de locutorio con dos tías y dos primas. "He agradecido mucho hablar de Parets [del Vallès], de cómo están todos. Me hace sentir más cerca de casa, una pizca más libre. Y espero como agua de mayo el vis a vis de mañana con Blanca y mis hijas. Un vis a vis de tres horas", ha señalado. Será el primero después de 9 meses de cárcel, que ha conseguido al cumplir un tiempo tasado de prisión, trabajos realizados y buena actitud.

WhatsApp Image 2018 12 08 at 22.41.44

El conseller, que es un reconocido periquito, ha recordado que hoy se jugaba el derbi entre el Espanyol y el Barça. "Hoy hay fútbol, partidazo, Espanyol-Barça. Escribo antes del partido. No hay que decir cuál es el resultado que a mí me gustaría. El otro día a Basté le dije "el sábado os daremos un disgusto"... (espero no haberme de comer las palabras...). Un partido de fútbol en la cárcel es curioso. Cuando marca el equipo del recluso, muchos de ellos con el palo de la escoba repiquetean la puerta de hierro de la celda. En Estremera, con reclusos de tantas nacionalidades, el Mundial era todo un espectáculo de ruidos y golpes en las puertas de la celda todo el día", ha subrayado.