El Tribunal Constitucional ha anulado gran parte de la moción rupturista aprobada por el Parlament de Catalunya el 5 de julio pasado que reiteraba los objetivos políticos de la declaración aprobada el 9 de noviembre del 2015 y que sirvió de pistoletazo de salida de la hoja de ruta del procés. El texto fue impugnado por el gobierno de Pedro Sánchez y el alto tribunal lo ha estimado parcialmente.

El Constitucional anula del apartado 1 al apartado 5 de la moción, los de más calado político. El apartado 1 "ratifica su firme voluntad de llevar a cabo las actuaciones necesarias previstas y aprobadas por este Parlament, para alcanzar y culminar democràticamente la independencia de Catalunya".

En el segundo apartado, la cámara reitera los objetivos políticos de la declaración del 9 de noviembre del 2015 sobre el procés, en cumplimiento de los mandatos de las elecciones del 27 de septiembre del 2015, legitimados por los resultados del referéndum del 1-O y las elecciones del 21-D. El siguiente apartado anulado expresa la voluntad de defender el derecho a decidir y a la autodeterminación, desde vías democráticas y no violentas.