Puntuales, una hora y media antes del inicio del juicio, el major Josep Lluís Trapero y la intendente Teresa Laplana entraban en la Audiencia Nacional. Con un tapón importante en el control de entrada donde se están acreditando todos los periodistas, los dos acusados esperan con su abogada, Olga Tubau. "Nos han dicho que llegáramos temprano porque es el primer día", dice una de las personas del equipo que se ha desplazado a Madrid.

Los Mossos han desembarcado en la capital del Estado. Llegaron ayer con el AVE de las cinco y media de la tarde. En el coche seis del tren compartían asiento Tubau y Laplana. Y al lado, Trapero. Con ellos, Ferran López y Joan Carles Molinero. Los que fueron el dos y el tres de Trapero cuando pasaron los hechos y los que, junto con el major, diseñaron el dispositivo del referéndum y después el plan para detener a los miembros del Govern si llegaba el caso.

Trapero y López tenían asignado a Carles Puigdemont. Pero la orden no llegó nunca. Y, de hecho, nunca se escribió el plan, que es una pieza central entre las pruebas que se presentan en el juicio.

López y Molinero ya están en Madrid. Han acompañado esta mañana hasta la Audiencia Nacional, en el edificio de San Fernando de Henares, a Trapero y Laplana, pero después se han vuelto a ir hacia el hotel, en Madrid. No pueden entrar en el juicio porque comparecen como testigos. Y no pueden saber nada de lo que pase dentro de la sala. A pesar de que en pleno siglo XXI, con las nuevas tecnologías, la retransmisión del juicio en directo y los minuto a minuto de los digitales, la medida no tiene ningún tipo de sentido.

Quien sí que estará dentro de la sala es el comisario jefe de los Mossos, Eduard Sallent. Ha llegado antes de que el propio Trapero a la Audiencia Nacional y seguirá el juicio desde el espacio de público.

Eduard Sallent Mossos - ACN

La comitiva de los Mossos no tiene ningún tipo de contacto con la que fuera la cúpula política. Ayer, en el andén de la estación de Atocha, policías y políticos no se cruzaron ni las miradas.

Pere Soler y César Puig están en hoteles diferentes. Y hoy también han llegado por separado.

Por recomendación de las defensas, han decidido separar la línea política de la policial y eso hará que ni tan sólo los miembros del Govern vengan ningún día al juicio. Hoy el apoyo se ha trasladado en forma de tuit.