El presidente del Parlament, Roger Torrent, está convencido de que buena parte del electorado de Ciutadans sintió vergüenza de sus representantes durante la bronca política de este jueves en la cámara catalana en las votaciones del debate de política general.

En una entrevista en RAC1, Torrent ha pedido una "reflexión" y ha señalado que a nadie se le escapa que hay unas elecciones españolas convocadas y que todas las actitudes tienen que ver con la voluntad con "maximizar los resultados electorales".

El republicano ha considerado que durante la sesión parlamentaria de ayer se vivió un "espectáculo lamentable" que los ciudadanos de este país no se merecen y que no se corresponde con la convivencia real en la sociedad catalana. "Vimos escenas que en el Parlament no se tendrían que haber producido", ha lamentado.

En este sentido, se ha comprometido que nunca más "se falte al respecto institucional" ni "que se insulte y se calumnie" en el hemiciclo. Con referencia a la intervención del presidente de Cs en el Parlament, Carlos Carrizosa y de la diputada Lorena Roldán, Torrent ha avisado de que no permitirá que se diga que "el presidente de la Generalitat lidera comandos".

"Respeto institucional"

El día después de la tensión en el Parlament, Torrent ha considerado que se ha entrado en una "dinámica de falta de respeto institucional" y ha añadido que él mismo sintió vergüenza del conjunto de la cámara, que incluye "todos los grupos parlamentarios", ha añadido.

El republicano lo ha calificado "de espectáculo lamentable que no se merece la ciudadanía". Y ha añadido, que lo que pasó ayer al hemiciclo no refleja la convivencia real de la societat catalana, aunque algunos se empeñen al asegurarlo. Torrent ha definido el Parlamento como "el templo de la palabra".

Ante la posible decisión del Consejo de Ministros de recurrir algunas de las propuestas de resolución aprobadas ayer al Parlamento en el debate de política general, Torrent ha recordado que se trata de "posicionamientos políticos" y ha añadido que "sólo faltaría que el Parlament no se pudiera pronunciar sobre cuestiones como la amnistía".