El president, Quim Torra, ha reprochado que quien ha puesto en riesgo la cohesión y la convivencia de manera irresponsable en Catalunya ha sido el estado español. Desde la tribuna del Parlament ha tildado el papel del gobierno de Mariano Rajoy y del rey Felipe VI con las presiones a empresas para que se marcharan de Catalunya de "comportamiento mafioso" e "indecencia".

El jefe del ejecutivo catalán ha lanzado estos reproches durante el debate monográfico sobre la agenda social y la convivencia, convocado a petición de Ciudadanos, donde ha advertido que "la fractura no vendrá nunca por un debate político". "La fractura es hija de un silencio. Eso sí que fractura", ha asegurado, por lo cual ha reclamado una vez más "un debate político sin amenazas".

"Lo que realmente fractura es que no se pueda hacer un referéndum de autodeterminación acordado y vinculante. No queremos que nadie haga creer que la convivencia es el silencio", ha exigido.

Ha sido al hilo de estas denuncias cuando ha apuntado directamente al gobierno de Mariano Rajoy y al rey Felipe VI a raíz de la operación para "hacer chantaje" a empresas y bancos para que se marcharan de Catalunya.

El president ha tildado de "indecencia" y "comportamiento mafioso" la implicación de las dos principales instituciones del Estado en la operación, y ha aconsejado que abandonen el "juego sucio y el miedo".

"¿De qué tipo de monarquía estamos hablando?", se ha preguntado el president: "¿Se imaginan a la reina de Inglaterra llamando a empresas inglesas o escocesas para que se vayan del país?". 

Torra ha concluido que esta operación orquestada desde el Estado "es de una perversidad absoluta": "Tiene como fin acabar con las personas que defienden una idea, es lo que denominamos la causa general contra el independentismo", ha denunciado.

Por contra, ha insistido en que el independentismo ha sido siempre pacífico y ha mostrado el buen tono. "Eso en el fondo también les escuece. Hemos hablado y practicado la revolución de las sonrisas, renunciamos a la violencia y la agresividad", ha asegurado, advirtiendo que la violencia ha llegado con el 1-O de las fuerzas policiales o con las personas que arrancan lazos.

Ha replicado a los reproches de Ciudadanos, advirtiendo que el espacio público tiene que ser libre y no es nunca neutral y ha emplazado a parar la ultraderecha en las calles de Catalunya, para "combatir el huevo de la serpiente del fascismo".

Basta de amenazarnos

Torra no ha ahorrado tampoco las críticas a Ciudadanos, impulsores del debate, a quienes ha acusado de crispar la política catalana, hablando con desprecio, con ausencia de respeto institucional. "Basta de amenazarnos con prisiones, con el 155, cuando nosotros sólo queremos tener un debate democrático y pacífico. No tengan miedo nunca de las urnas", ha reclamado.

Igualmente los ha acusado de que "nunca han estado al lado de la reivindicación de una financiación justa" para Catalunya y, aunque ha insistido en que esta no es la solución que propone el Govern, los ha emplazado a plantear su propuesta financiera para superar esta situación.

Asimismo, ha reclamado a la formación naranja que no hagan un conflicto de la escuela ni de la lengua, una inmersión que es un modelo en Europa, aunque ha ironizado que lo desconocen porque "ustedes no saben qué pasa, más allá de España".