El president de la Generalitat, Quim Torra, ha planteado este jueves al vicepresident, Pere Aragonès, hacer sustituciones en los consellers nombrados a propuesta de ERC, pero este lo ha rechazado, según han explicado fuentes de la Presidència a Europa Press.

Según ha avanzado Catalunya Ràdio, el president ha llamado al vicepresident para hacerle este planteamiento, después de explicarle que quería hacer cambios en el Ejecutivo en tres de las conselleries designadas a petición de JxCat. Torra ha sustituido a la consellera de Empresa y Conocimiento, Àngels Chacón; el conseller de Interior, Miquel Buch, y la de Cultura, Mariàngela Vilallonga.

Fuentes de la Vicepresidencia consultadas por Europa Press han asegurado que tanto ellos como el partido tienen "toda su confianza" en los consellers que ocupan sus cargos. Aseguran que hay mucho trabajo por hacer y que los consellers están trabajando "intensamente" en sus ámbitos contra la pandemia, en alusión a la consellera de Salud, Alba Vergés; el de Enseñanza, Josep Bargalló, y el de Trabajo y Asuntos Sociales, Chakir El Homrani.

La visita de Quim Torra y Carles Puigdemont a Cotlliure este mes de agosto no se limitó a un homenaje a la tumba de Antonio Machado. Los dos presidentes aprovecharon el encuentro en la Catalunya Nord para intentar cerrar las carpetas pendientes, entre ellas, el calendario electoral. Torra quería convocar las elecciones antes de la vista para su inhabilitación en el Tribunal Supremo del 17 de septiembre. Por el contrario, no compartían esta idea ni Puigdemont ni la cúpula de JxCat, en pleno proceso de construcción como partido, que no han escondido la voluntad de retener la agenda, aunque eso comportara que sea el Supremo quien tumbe al presidente de la Generalitat. O precisamente por esta razón, para que el Supremo acabe inhabilitando a un president de la Generalitat en ejercicio por haber colgado un cartel en el balcón del Palau.

El acuerdo final entre los dos presidentes, según fuentes conocedoras de la conversación, pasaba porque Torra -que ya había intentado sin éxito fijar los comicios para el 4 de octubre- asumía no convocar las elecciones, sin embargo, en contrapartida, JxCat aceptaba la remodelación de Govern que el presidente decidiera. La reunión, con paseo incluido ante los fotógrafos, se había completado de manera satisfactoria para todas las partes.