Quim Torra y Pere Aragonès han querido sellar las grietas que han ido apareciendo en el acuerdo entre JxCat y ERC en el Govern, también por lo que respecta al ultimátum que el presidente lanzó a Pedro Sánchez el martes en la primera jornada del debate de política general donde fijó un plazo de un mes para que concrete su propuesta para Catalunya o bien los diputados independentistas retirarán su apoyo al ejecutivo del PSOE en el Congreso.

El comunicado conjunto que han leído los dos socios de Govern se remite al debate de política general y se señala, entre las "vías de acción republicana" que ha puesto en marcha al ejecutivo, la "fecha de caducidad" que ha impuesto al gobierno de Sánchez. "Hemos puesto fecha de caducidad a la estabilidad del gobierno de Pedro Sánchez si no presenta una propuesta para Catalunya, sin renunciar nunca al diálogo con el Estado para resolver políticamente un conflicto que es político", ha leído Torra.

Cuando se ha preguntado al respecto en el turno de preguntas posterior, el president ha explicado que no ha tenido respuesta a la carta que envió al responsable del ejecutivo español y ha insistido en la voluntad de diálogo y negociación "hasta el último momento". Ha evitado, sin embargo, entrar en las diferencias con ERC en relación al ultimátum a Sánchez y se ha remitido al contenido del comunicado.

Por su parte, el vicepresident tampoco ha entrado a abordar estas diferencias aunque ha advertido que el gobierno de Pedro Sánchez no tendrá un "apoyo gratis" del independentismo si no mueve pieza, porque es muy difícil garantizar la estabilidad si rechaza debatir a fondo la reclamación de Catalunya sobre la autodeterminación y "los elementos que tenemos encima de la mesa", en referencia a los presos i exiliados.