El diario The New York Times ha cuestionado con dureza la posible elección de Josep Borrell como nuevo jefe de la diplomática europea y le ha vuelto a sacar los trapos sucios. El diario ha afirmado que la elección de Borrell para este cargo ha sido "una de las más sorprendentes" que ha tomado la UE, "dada su edad (72 años) y "su tendencia a entrar en polémicas".
"El señor Borrell sugirió en un discurso el año pasado que todo lo que tuvieron que hacer los EE.UU. para conseguir su independencia fue matar a cuatro indios", recuerda el diario sobre una afirmación que causó mucha polémica en Estados Unidos y que indignó a las comunidades indias.
The New York Times apunta que la actual responsable de la diplomacia europea, la italiana Federica Mogherini, no ha obtenido mucho éxitos visibles en su mandato, pero apunta que Borrell todavía es menos diplomático. "Tiene fama de sinceridad y franqueza, lo que puede resultar un activo o un pasivo, dependiendo del punto de vista. No hace mucho abandonó muy enfadado una entrevista de la Deutsche Welle por las preguntas que le hacían sobre cómo trataba España a los independentistas de Catalunya, donde nació y a cuya independencia se opone enérgicamente", indica.
"¿Un español que habla sin pelos en la lengua puede ser la voz de Europa ante el mundo?", se pregunta The New York Times
El diario también acusa a Borrell de mantener posiciones polémicas contra el presidente Donal Trump -"actúa como un cowboy para derribar a Maduro"- y contra el presidente Putin -"el embajador de España en Rusia ha sido amonestado", y al ser favorable a un reconocimiento unilateral de la independencia de Palestina por parte de Europa. "También ha mostrado fuerte simpatía hacia el gobierno de Irán, y ha alabado el "papel esencial estabilizador" de este país en Siria", apunta.
No descarta incluso que en los próximos días Borrell tenga que responder a acusaciones de corrupción. "Antes de que lo confirmen, es probable que Borrell tenga que enfrentarse a preguntas sobre acusaciones de corrupción, incluyendo una multa de 30.000 euros que le impusieron el otoño pasado por tráfico de información privilegiada el año 2015, con respecto a su paso por el consejo de administración de la empresa Abengoa. El señor Borrell negó las acusaciones, pero decidió no recurrir la multa", concluye.