El abogado escocés de Clara Ponsatí, Aamer Anwar, ha denunciado públicamente el trato recibido por la sanidad de Gran Bretaña. Explica su caso personal: su padre de 82 años se rompió dos huesos de la pelvis y fue ingresado en un hospital. En vez de atenderlo inmediatamente, la demora llegó hasta el punto que "durante horas acumulaba su propia orina y excremento" y confiesa: "A mi madre de 71 años tuvo que acabar limpiándolo y alimentado-lo" desde la misma cama del hospital para no ser atendido.

Anwar lamenta que los auxiliares presentes "ignoraran" en una dura crítica en el NHS, el Servicio Nacional Público del Reino Unido. La inoperència que Anwar pone sobre la mesa incluso dice que hizo peligrar la vida de su padre, los hechos se produjeron el otoño pasado. Y por todo ello, el abogado de Ponsatí tiene "el corazón roto".

La sanidad pública británica es la segunda preocupación mayor por la ciudadanía, sólo por detrás del brexit. El 77% de los pacientes son atendidos dentro de las primeras cuatro horas de ingreso, un 23% restante pueden superar esta espera. Y las cirugías planificadas también han retrasado su día de operación.