Joan Tardà continúa firme en su defensa de un frente común de las izquierdas catalanas en las próximas elecciones tanto al Parlament (donde las encuestas auguran una fortísima subida de Aliança Catalana) como también en las próximas elecciones españolas, que si Pedro Sánchez no decide lo contrario, deben celebrarse el verano de 2027. Así lo ha demostrado en una entrevista a la Cadena Ser, donde ha vuelto a defender esta apuesta. También la ha planteado en reiteradas ocasiones su sucesor como portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, que ha reclamado una candidatura que aglutine las izquierdas del conjunto del Estado. Ahora bien, han topado con la dirección de ERC, con Oriol Junqueras al frente, que reflexionan que si bien esta tiene sentido en las elecciones europeas (donde ERC se presenta en coalición con EH Bildu o el BNG, por ejemplo) en otros comicios pierde la razón de ser.

"Hay que construir frentes populares"

"Hay que construir frentes populares, nosotros intentaremos convencer a la dirección de ERC y a las bases de ERC de que, en 2027, todas las fuerzas que estén a la izquierda del PSC deberíamos ir en la misma candidatura, porque así se crea el preámbulo de lo que deberíamos hacer en 2028, cuando se acabe la legislatura catalana, es decir, repetir la experiencia", ha detallado durante la entrevista, en línea con todo lo que había ido defendiendo en los últimos meses. Este "nosotros" de Tardà hace referencia a Àgora Republicana, que se ha convertido en la única corriente interna dentro del partido, a pesar de la fuerte división de hace solo un año, y que lejos de ser crítica con la dirección lo que quiere es conseguir que el partido se mueva hacia estos planteamientos, que, al menos de momento, no son mayoritarios. Para Tardà y sus compañeros estas alianzas son clave en el momento actual de auge de la extrema derecha, y piden dejar atrás los pactos con otras formaciones como Junts. El exlíder del partido en Madrid, que es a la vez el consejero nacional más votado por la militancia, sabe que también tiene que convencer a las bases de la propuesta, porque en el último congreso de Esquerra, en marzo, rechazaron una enmienda suya que apostaba por abrir el partido a personas no independentistas y convertirse en la casa grande del soberanismo. 

"Introduciremos el debate dentro del partido" ha confirmado Tardà de cara al año que viene, el único (si no se avanzan elecciones españolas) que la formación no se presentará a ninguna elección. Espera que estos planteamientos no se den, eso sí, solo dentro de ERC, sino también en la CUP y los Comunes, a quienes pide que salgan de su zona de confort y exploren alianzas con otras formaciones, dejando de lado aquello que los separa. Estos tres partidos sufrieron un importante batacazo en las últimas elecciones catalanas. Si durante la presidencia de Pere Aragonès sumaban 50 diputados, ahora apenas son 32.