El departamento de Exteriores de Suiza ha hecho público un comunicado oficial aceptando la visita que realizará el domingo el president Carles Puigdemont y autorizándole a pronunciar libremente discursos políticos "respetando el ordenamiento jurídico suizo".

Suiza ha indicado que Puigdemont "puede moverse libremente por el espacio Schengen", y que su estancia en el país helvético "se rige por la legislación suiza y por el acuerdo sobre la libre circulación de personas". Del comunicado se desprende en este sentido que Suiza no contempla dar respuesta a una orden de detención por parte de España, en caso de que se produjera.

El país helvético añade que la visita es de carácter privado y responde a una invitación del Festival de Cine y Foro Internacional de Derechos Humanos (FIDH). "Puigdemont hará declaraciones públicas en varias ocasiones durante su estancia en Suiza", precisa.

 

El ministerio de Exteriores suizo hace equilibrios para no herir las susceptibilidades del Gobierno español, y evita pronunciarse sobre la situación política catalana. Dice que es una cuestión interna española, que se debe abordar en el marco del orden constitucional español, y que "las autoridades suizas y españolas están en contacto", sin más concreciones.

Suiza sólo precisa que "en caso de alteración del orden público", hoy por hoy hipotético, sí que podría tomar medidas.